El Plan de Acción de Mejora del Ambiente Sonoro de Santa Cruz de Tenerife, con el que el Ayuntamiento persigue reducir el ruido en la capital, incluye la creación en el municipio de los denominados "oasis sonoros urbanos". Estos pretenden, según se indica en el citado documento, ser espacios que, por sus características, se puedan convertir en "refugios para la población con relación a la contaminación acústica".

Para ello, se localizarán lugares en la ciudad en los que se dé una combinación de niveles relativamente bajos de ruido y un predominio de sonidos agradables, pasando a ser protegidos bajo el concepto de "oasis sonoros". En estos se llevarán a cabo todas las medidas necesarias para que se respete dicha condición y los vecinos puedan disfrutar de estos espacios "tranquilos".

Se buscará que la mayoría de la población pueda tener acceso fácil a uno de estos "oasis sonoros", es decir, que "la mayor parte de los ciudadanos dispongan de uno de ellos relativamente próximo a su residencia", se indica en el Plan de Acción de Mejora del Ambiente Sonoro de Santa Cruz.

Para la creación de los "oasis sonoros" de la capital chicharrera, este documento propone la elaboración de un estudio, que supondrá una inversión municipal de unos 6.000 euros, con el que se definirá la metodología y requisitos para que un espacio pueda tener esta calificación.

"El objetivo es que, a medida que se identifiquen estos espacios, se les vaya definiendo un programa específico de mejora, preservación y protección. Para ello, se debe dar un reconocimiento específico en el Plan General de Ordenación (PGO) del municipio y demás elementos de planeamiento urbano, y establecer un plan municipal para la promoción de estos espacios en el desarrollo de la ciudad", se indica en el documento.

En estos "oasis sonoros", los chicharreros y los visitantes podrán descansar del ruido, convirtiéndolos incluso en un atractivo turístico más de la ciudad.

El Plan de Acción de Mejora del Ambiente Sonoro de Santa Cruz, conocido también como Plan del Ruido, ya ha sido aprobado de manera provisional y se encuentra en exposición pública. Si en el plazo de un mes, que empezó a contar desde el sábado, no se presenta ninguna alegación, reclamación o sugerencia, el texto será aprobado de manera definitiva.

Ocio nocturno

Entre otras de las medidas que se incluyen en este documento se encuentran la de reducir progresivamente los ruidos relacionados con el ocio nocturno, con la imposición de "exigencias acústicas" a locales y terrazas; la reducción de la velocidad de los coches, y la creación de subvenciones para instalar en los edificios ventanas con aislamiento.