Opinión

Condenadas por hacer periodismo

Narges Mohammadi

Narges Mohammadi / El Día

Mujeres valientes que se enfrentan a las injusticias que otros quieren esconder. Profesionales de la comunicación que tienen clara la vocación principal del periodismo. Ellas son las incansables de la información real y la justicia social que, gracias a su papel dentro del ámbito del periodismo, son un testimonio veraz de su compromiso con la profesión y su lucha constante por la libertad de prensa y la igualdad de género. Pero, como todo, tiene su precio. Las periodistas suponen más del 50 por ciento de las mayores condenas dictadas durante este año a los profesionales de la comunicación en el mundo. A ellas se les ha impuesto cinco de las nueve mayores condenas dictadas desde enero de 2023 contra profesionales de la información. Figuras emblemáticas en Bielorrusia, Birmania o Burundi han sido condenadas al menos a diez años de cárcel. Según un estudio de Reporteros Sin Fronteras (RSF), nunca tantas mujeres periodistas habían sido tan duramente reprimidas en los últimos cinco años. Sus nombres responden a Maryna Zolavata, Lyudmila Tchekina y Valeryia Kastsiouhova, en Bielorrusia, y Shin Daewe, en Birmania. Estos dos países, que ya figuran entre las mayores cárceles de periodistas del mundo, son también los que castigan con mayor severidad a las mujeres que se atreven a defender la libertad de informar. En Burundi, a la presentadora de radio Floriane Irangabiye, la primera mujer periodista condenada en el país al menos en los últimos cinco años, se le impuso una pena de diez años de cárcel en enero de 2023. En el mismo mes pero de 2024, la junta militar birmana dio un paso más en su escalada de represión contra los periodistas y condenó a cadena perpetua al periodista documentalista birmano Shin Daewe. Desde el golpe de Estado de febrero de 2021, no se había impuesto una pena tan dura a un periodista. Por otra parte, en Irán, la ola de represión desatada contra los periodistas desde que surgiera el movimiento Mujer, Vida, Libertad no deja de crecer. Tal y como cuenta RSF, en octubre de 2023, tras cubrir la muerte de la joven Mahsa Amini, las periodistas Elahe Mohammadi y Hamedi fueron condenadas a un total de 12 y 13 años de cárcel, pero, tras la aplicación del principio de no acumulación de condenas se redujeron a seis y siete años de cárcel. Finalmente, el pasado mes de enero quedaron en libertad provisional tras pasar quince meses en prisión. Cuatro mujeres periodistas permanecen entre rejas en Irán, entre ellas Narges Mohammadi, Premio Nobel de la Paz 2023, encarcelada desde noviembre de 2021. Además de desafíos extremos como estos, las mujeres periodistas también luchan contra la desigualdad de género dentro de sus propias redacciones y organizaciones mediáticas. A menudo, se enfrentan a barreras para avanzar en sus carreras, como la brecha salarial, la falta de oportunidades de liderazgo y la discriminación basada en el género. En países como los anteriormente descritos la situación es bastante más adversa. En un momento en que la verdad y la integridad periodística están bajo amenaza, el papel de las mujeres periodistas es más importante que nunca.

@luisfeblesc