Es más fuerte el deseo de los alemanes de viajar a Mallorca que las advertencias y trabas del Gobierno de Angela Merkel para que no lo hagan. Ni siquiera la obligación de presentar una prueba diagnóstica a partir del próximo martes a su regreso al país ha disminuido la intensidad del desembarco alemán en la isla.

“No compartimos con nadie nuestros planes para ir de vacaciones a Mallorca», afirma una pareja de Fráncfort, con cierto cargo de conciencia, al periódico alemán a Die Welt. «Hay bastantes personas que se lo tomarían mal ”, reconocen. «Muchos se esfuerzan por cumplir con las medidas y las recomendaciones del Gobierno, por eso preferimos ni siquiera subir fotos de Mallorca a Instagram».

El diario Frankfurter Allgemeine, por su parte, lo ejemplifica en una frase: «Ira en Alemania por las vacaciones de Semana Santa en Mallorca», de ahí que algunos turistas sientan cierto cargo de conciencia, pero no la mayoría, a tenor de los miles de alemanes que ya han llegado a la isla. El sábado aterrizaron en el aeropuerto de Palma 60 aviones, principalmente de Fráncfort, Múnich, Hannover, Düsseldorf y Stuttgart. Y este domingo lo hicieron otros 70 vuelos más, provocando algunas concentraciones en los filtros aeroportuarios donde deben mostrar su prueba diagnóstica negativa, mucho menores al caos que se produjo en los filtros de vuelos nacionales.

Así se realizan los controles a pasajeros extranjeros en el aeropuerto de Palma

Así se realizan los controles a pasajeros extranjeros en el aeropuerto de Palma DM / EP

Solo Eurowings, según el rotativo Die Weltvoló 44 veces a la isla desde nueve aeropuertos alemanes entre el sábado y el domingo, cuatro veces más vuelos que el fin de semana anterior, que registró solo doce, cuando empezó la llegada de turistas alemanes para disfrutar en la isla en Semana Santa. La aerolínea no proporcionó el número exacto de pasajeros de cada avión, pero sí confirmó que la ocupación de plazas era bastante elevada, subraya Die Welt en su información. No obstante, la oferta de vuelos todavía es un 40% inferior a la que existía antes de que empezara la pandemia.

Por su parte, Tui ha desplazado a Mallorca durante el fin de semana a casi 2.000 turistas distribuidos en quince aviones desde cinco aeropuertos alemanes. Los vuelos no estaban completamente llenos, pero sí con una ocupación similar a la del fin de semana anterior.

El gobierno alemán desaconseja los viajes dentro y fuera del país porque considera que la movilidad es uno de los principales impulsores de la pandemia. Pero este fin de semana han empezado las vacaciones de Semana Santa en la mayoría de estados federales y miles de alemanes han preferido no atender las recomendaciones del Gobierno de Merkel, como lo pruebas las 532 conexiones con Mallorca entre el pasado 26 de marzo y el próximo 5 de abril, un 51% menos que durante las vacaciones de Semana Santa de 2019, el último año sin pandemia.