El silbo gomero ‘toma’ las calles del casco de La Laguna

Silbadores anuncian en la Ciudad de los Adelantados que esta cumplirá el lunes 24 años como Patrimonio de la Humanidad

D. Ramos

«¿Qué quieres que le diga? ¿Que se toque la cabeza? ¿Que se acerque la mano a la oreja? ¿Con qué mano?», pregunta Rogelio Botanz. «La cabeza y con la mano derecha», le responde su interlocutor. Botanz lo silba desde la calle de La Carrera y uno de sus compañeros, en el balcón del Teatro Leal, realiza la acción. Son apenas las 10:00 horas, se despereza el casco de La Laguna en una mañana fría y que amenaza lluvia, y la iniciativa de silbo gomero para anunciar el XXIV aniversario de La Laguna como Ciudad Patrimonio de la Humanidad calienta motores.

Los viandantes se sorprenden con los ensayos de silbo. «Muchos gomeros sueltos», bromea un hombre. La acción se desarrolla en vísperas del 4 de diciembre, aniversario de la inscripción de La Laguna en la Lista de Patrimonio Mundial de la Unesco como Ciudad Patrimonio de la Humanidad, un reconocimiento que tuvo lugar en Marrakech en 1999.

Profesor, cantautor y uno de los organizadores de la iniciativa, Rogelio Botanz explicó este sábado que el silbo iría pasando por distintos puntos de la ciudad: la torre de La Concepción, el Orfeón La Paz, la Catedral, el balcón de una familia gomera... «Festejamos que pocas ciudades tienen dos patrimonios mundiales dentro de su realidad», indicó tras poner de relieve el significativo número de miembros de la comunidad gomera que residen en La Laguna.

En concreto, con este proyecto se anuncia la efeméride a través del silbo gomero. Surgió por iniciativa de Botanz y la Escuela de Silbo Gomero Acentejo en 2016, aunque vinculado a la celebración de la Noche en Blanco. «Pero desde 2022 ha pasado a ocupar su espacio natural en el marco de las celebraciones de la declaración de La Laguna como Ciudad Patrimonio», destacaron desde el Ayuntamiento de La Laguna.

Fue a partir de las 10:00 horas cuando dio comienzo la acción, con un primer mensaje que se realizaría desde la torre de La Concepción, pasando por el Teatro Leal y que viajó a la azotea del Orfeón La Paz y desde ahí al campanario de La Catedral, encaminándose por la calle de La Carrera desde el balcón del domicilio de una familia de ascendencia gomera hasta el de la Casa de los Capitanes, donde el último de los silbadores participantes trasladó el mensaje de inauguración.

La intención, apuntaron los organizadores antes del acto, es que, tras el mensaje inaugural, cada hora en punto, y hasta las 13:00, se emitiesen distintos mensajes silbados relativos al proceso y los argumentos que justificaron la inscripción de La Laguna en la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco. Por su parte, de 13:00 a 14:00 horas estaban previstos «telegramas silbados» frente al Teatro Leal. Eso último consistiría en que desde una mesa situada a pie de calle, con una exposición de libros relativos al patrimonio lagunero, el público elegiría cualquier párrafo que silbadores desde la calle trasmitirían a silbadores situados en el balcón del Teatro. «Mostrarán así la capacidad del silbo gomero para trasmitir cualquier mensaje verbal no conocido previamente», detallaron.

La gestión de la actividad corrió a cargo de la Asociación Cultural Silbo Gomero y fue realizada por silbadores de la Isla Colombina, con la presencia de maestros silbadores del Aula Insular en sus distintas sedes locales ubicadas en La Gomera, en Gran Canaria y en Tenerife (particularmente en La Laguna).