El presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, y la consejera de Cultura, Rosa Elena García, participaron, el pasado domingo, en el acto institucional de la entrega de los Premios Canarias y Medallas de Oro que el Gobierno de Canarias otorga cada 30 de mayo, y que en esta ocasión reconoce al Romancero de La Gomera.

Durante la jornada, recordó el arraigo que esta manifestación cultural tiene en la isla y la conservación alcanzada gracias a la tradición oral que ha ido pasando de generación en generación, y que se plasmó con la participación de Diego Chinea y Guadalupe Torres, quienes representaron a la sociedad gomera en el acto.

«El romancero ha encontrado en La Gomera su reducto de vida. No hay celebración en la isla en la que el romance no esté presente. Una muestra de la riqueza que ha aportado a la cultura gomera, especialmente, marcada por la labor que han ejercido los gomeros y las gomeras con el paso del tiempo, siendo auténticos mantenedores de esta tradición». Por este motivo, destacó el reconocimiento otorgado en el Día de Canarias y que sirve para afianzar sus singularidades y seguir avanzando en la investigación sobre este fenómeno, a través de las universidades canarias y reconocidos expertos como Maximiano Trapero.

El Romancero Gomero es uno de los legados de carácter cultural y etnográfico más destacados de la isla y, ahora, de Canarias, tratándose de una de las mayores recopilaciones de romances que existen de habla hispana. Desde el siglo XVI, los romances permanecen vivos e inalterados, convirtiendo a la isla en uno de los lugares más importantes en cuanto a la conservación y pervivencia del romancero tradicional, y que a día de hoy sigue nutriéndose con el paso de los años.