Miembros del Grupo de Información de la Guardia Civil de la Comandancia de Las Palmas identificó durante la mañana del pasado miércoles, diecisiete horas después de la finalización de la alarma, a la persona que dejó depositados dos bolsos en las inmediaciones del centro de seguridad de Vecindario, dadas las circunstancias del hecho y el actual Nivel Antiterrorista en curso, la activación de un protocolo de seguridad que movilizó una serie de medios de la Guardia Civil y la Policía Local con el fin de verificar el contenido de dichos objetos.

De esta manera, en base a la observación de las grabaciones de las pertinentes cámaras de seguridad que rodean el centro, los agentes del Grupo de Información vieron cómo la persona previamente había recogido de un contenedor de basura cercano los bolsos en cuestión.

A continuación se dirige con ellos a un murete exterior del Centro, sentándose durante un corto espacio de tiempo para, a continuación, abandonar el lugar a pie tras dejar aquellos en el lugar.

Paralelamente a las medidas de seguridad tomadas para comprobar que finalmente se tratase de una falsa alarma, la Guardia Civil ya iniciaba las pesquisas para aclarar los hechos.

Finalmente el pasado día 21, tras su identificación, el autor de los hechos fue finalmente localizado, comprobándose que es una persona de nacionalidad española, sin antecedentes policiales ni vinculaciones que hiciesen creer en organizaciones terroristas de ningún tipo. Posteriormente los investigadores de la Guardia Civil, tras tomar manifestación a la persona descrita, pudo comprobar cómo presentaba una serie de características de tipo psicológico que apuntaban a una falta de intencionalidad o de comprensión de los hechos expuestos.

Por todo ello, y tras realizar las oportunas gestiones con el Juzgado de guardia correspondiente de San Bartolomé de Tirajana, la Guardia Civil no ha procedido a tomar ninguna medida procesal o policial contra esta persona, remitiendo al citado Juzgado el atestado completo con todas las diligencias originadas por la investigación.

De todas maneras, los funcionarios del Instituto Armado recuerdan que este tipo de comportamientos puede conllevar responsabilidades de tipo penal, en base al citado artículo, el cual especifica que quien afirme falsamente o simule una situación de peligro para la comunidad o la producción de un siniestro a consecuencia del cual es necesario prestar auxilio a otro, y con ello provoque la movilización de los servicios de policía, asistencia o salvamento, será castigado con la pena de prisión de tres meses y un día a un año o multa de tres meses a dieciocho meses. En esa misma línea se manifestó recientemente el delegado del Gobierno.