Racionalidad y responsabilidad son las cualidades que definen los Presupuestos con los que el Cabildo de Tenerife trabajará durante este nuevo año. Se trata de un ejercicio que confiamos que pueda ser el último del duro ciclo económico que nos ha tocado enfrentar, desde hace seis años. Pero somos conscientes, en este sentido, de que aún nos queda por delante un período complicado para todos: ciudadanos, familias, empresas e instituciones. De ahí que cobre especial importancia el hecho de que las cuentas aprobadas por la Corporación insular hayan obtenido el respaldo unánime de todas las fuerzas políticas, un gesto que simboliza el propósito de unidad ante esta situación.

No obstante, nos hallamos ante unos Presupuestos que siguen incidiendo en una premisa clara e incontestable, consistente en priorizar las políticas de servicios públicos y bienestar comunitario, en apoyo a los colectivos más desfavorecidos. No puede ser de otra manera y vamos a seguir al lado de las personas que más lo necesitan. Sirva como ejemplo la preferencia otorgada al Instituto de Atención Social y Sociosanitaria (IASS), considerado como la "joya de la corona" del Cabildo, por tratarse de un organismo plenamente enraizado entre esos sectores de la población que necesitan una cobertura especial.

Dicha premisa queda materializada en las cuentas insulares con el destino de 6 de cada 10 euros de los Presupuestos al desarrollo de ese tipo de políticas. Porque lejos de participar en la errónea dinámica de suprimir servicios públicos, cerrar actividades o privatizar recursos, entendemos que el mantenimiento de esas prestaciones es compatible con los ajustes a los que nos obliga la coyuntura presente.

De hecho, esta posibilidad surge gracias a la línea de actuación seguida por el Cabildo en los últimos años, desde que decidió realizar la tarea antes de que nadie se lo exigiera.

No hay que olvidar que esta institución se ha caracterizado, al menos en los últimos 25 años, por la austeridad y transparencia en su gestión, lo que le ha permitido tener fortaleza suficiente para adaptarse a situaciones como la actual. Virtud de esta circunstancia es su probada capacidad de ahorro, cuantificada en 120 millones de euros brutos, gracias al trabajo de ajustes dosificados y de gestión con austeridad, que ha hecho posible mantener la calidad y cantidad de los servicios prestados a la ciudadanía de la Isla.

Junto a los citados, otro de los objetivos fundamentales que nos hemos marcado es la creación de las condiciones que, en la medida de nuestras posibilidades, puedan favorecer la reactivación de la economía insular, porque sólo así será factible la generación de empleo. Por esto mismo creemos que el apoyo brindado a estos Presupuestos por todos los grupos políticos no solo anima a la institución, sino que también ayuda a trasladar confianza a las empresas, con el fin de incrementar la inversión y crear puestos de trabajo.

Todo ello, precisamente, dentro de un año que está llamado a marcar el final de la etapa de los ajustes, los recortes y la austeridad. Porque confiamos en que este 2013, sobre todo en su tramo último, acabe por conducirnos hacia un período diferente, donde la actividad económica comience a remontar de manera moderada pero progresiva, abriéndose camino a un nuevo periodo de crecimiento económico, generación de empleo y, en definitiva, de esperanza para muchas personas, sobre todo aquellas que peor lo están pasando.

*Presidente del Cabildo de Tenerife