El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha comprometido a impulsar, en la recta final de la legislatura, la mejora de la calidad de la democracia, y está dispuesto a debatir con los demás partidos cuestiones como la reducción de aforados en España.

Rajoy ha hecho de esta agenda de regeneración el principal compromiso político que le queda al PP hasta las próximas generales, tras dar por hecho que se ha encarrilado la recuperación económica y que se verá asentada con reformas pendientes como la fiscal.

El jefe del Ejecutivo ha hecho estas reflexiones en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP, tras la que el partido ha anunciado su disposición a discutir, no sólo internamente sino también buscando acuerdos con el resto de fuerzas políticas, nuevas medidas dirigidas, ha dicho la secretaria general, María Dolores de Cospedal, a mejorar la calidad del sistema democrático.

Ha sido Rajoy el que ha puesto encima de la mesa cuestiones que, como ha apuntado De Cospedal en rueda de prensa, están actualmente en el debate político, como la reducción del número de aforados, aunque también otras ideas que defiende el PP como la elección directa de los alcaldes -que gobierne siempre la lista más votada en los municipios- o la reducción de diputados y municipios.

El PP plantea la cuestión de los aforamientos una semana después del intenso debate que se produjo en el Congreso, con motivo de la reforma legal para el aforamiento del Rey Juan Carlos.