La compañía de Sheldon Adelson Las Vegas Sands oficializó ayer la elección de Madrid como lugar para levantar su complejo Eurovegas, una decisión que celebraron el Ejecutivo autonómico, el ayuntamiento de la capital y la patronal, pero que reprobaron los partidos de la oposición y los sindicatos.
La noche del viernes (madrugada de ayer en España) Las Vegas Sands Corp., grupo del que es accionista mayoritario el magnate estadounidense Sheldon Adelson, confirmó que la Comunidad de Madrid albergará su proyecto de ocio y juego, pero no concretó el suelo en el que se ubicará ni su extensión final.
Los terrenos candidatos son tres: Alcorcón, Paracuellos del Jarama/Torrejón y Valdecarros (este último en el término municipal de Madrid), y Las Vegas Sands anunciará más adelante cuál es el elegido para acoger una inversión de unos 17.000 millones de euros, que generará unos 260.000 puestos de trabajo, según indicó en un comunicado.
Con todo, Las Vegas Sands señaló que el proyecto "está en fases muy tempranas y pendiente de la resolución de los retos económicos dentro de Europa".
Tras varios días de rumores y espera de confirmación, ayer el Gobierno de la Comunidad de Madrid acogió con "satisfacción contenida" el anuncio, en palabras de la consejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Ana Isabel Mariño, que esgrimió que Adelson no ha tomado la decisión "por suerte", sino en base al trabajo "arduo" que ha llevado a cabo el Gobierno regional al poner en valor las infraestructuras y las posibilidades económicas de la región.
"Es el primer paso. Ahora hay que seguir trabajando, el inversor y nosotros, para que este proyecto se consolide", apuntó, antes de apuntar que hay cuestiones jurídico-legales que a partir de este momento habrá "que poner en marcha".
La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, calificó de "magnífica noticia" el anuncio, especialmente en los momentos "difíciles" que atraviesa España, ya que una nueva inversión extranjera es un estímulo de cara al futuro y un motor de regeneración económica y de creación de empleo.
Diversos representantes del PP saludaron la decisión. Entre ellos, la secretaria general del partido y presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, que dio la bienvenida a "todos los proyectos que puedan permitir que se generen puestos de trabajo".
Entre tanto, el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, pidió "calma, paciencia y prudencia" hasta conocer los plazos y las cifras concretas del proyecto.
García-Legaz reveló que los promotores del complejo comenzaron las negociaciones para instalarse en España hace cinco años, cuando el PSOE ocupaba el Gobierno, pero que no fructificaron, y fue el PP el que en enero las retomó con la implicación de seis ministerios y las comunidades de Madrid y Cataluña.
Toda la oposición, desde el PSM hasta IU, Equo y UPyD, así como los principales sindicatos (UGT y CCOO) criticaron el proyecto al considerar que va a generar "escaso empleo y de baja calidad, y que "desestabilizará" el sector servicios de la Comunidad.
Por el contrario Arturo Fernández, presidente de la patronal madrileña, se mostró convencido de que el complejo de ocio dará "muchas satisfacciones" porque posibilitará la generación de empleo y de riqueza "para España y la Comunidad".
A última hora de la tarde, alrededor de doscientas personas participaron en una cecerolada en la Puerta del Sol, frente a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, para mostrar su rechazo contra la "especulación" que, a su juicio, supone la instalación del complejo Eurovegas en la región.