El presidente del PP de Vizcaya, Antón Damborenea, afirmó ayer que el objetivo tanto del PP vasco como el PP de España es acabar con ETA y que no les "distraigan" con Sortu.

"No vamos a hacer la ola ni la campaña a gente que, a día de hoy, ni siquiera ha condenado la violencia de ETA; no estamos dispuestos a dar otro balón de oxígeno al terrorismo para que al día siguiente de las elecciones continúe con su actividad, bajo la marca que sea", añadió.

Damborena opinó, en una comparecencia informativa, que Sortu "se diferencia poco" de la antigua HB o de la ilegalizada Batasuna y añadió que "tienen la credibilidad que tienen".

Puntualizó, en relación a la manifestación en apoyo a la legalización de la nueva formación convocada para el próximo sábado, que "un supuesto partido democrático con unos supuestos estatutos democráticos y que rechaza la violencia no necesita convocar actos para poder ser legalizado".

"La postura del PP -subrayó- es que son los mismos y se quieren presentar a las elecciones, y ya dijimos en su momento que la prueba del algodón del acuerdo antiterrorista con el partido socialista es si Batasuna va a estar en las elecciones o no".

Recalcado que el PP "está en acabar con ETA y no en otra cosa", y recordó que en el pacto suscrito con el PSE-EE en Euskadi para sustentar el Gobierno vasco "está escrito cuál es el método eficaz para acabar con el terrorismo de ETA y el fin de ETA está próximo porque se ha aplicado la ley de partidos, además de otras medidas".

Por su parte, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, aseguró ayer que los españoles tienen el "convencimiento moral de que Batasuna y su nueva marca (Sortu) son ETA", motivo por el que, en su opinión, no pueden estar en los ayuntamientos y las instituciones tras los comicios de mayo.