El contrato para construir una ópera en la bahía de Palma no fue más que "un montaje" urdido y ordenado por el expresidente balear Jaume Matas (PP) y ejecutado por su conseller de Educación, el diputado Francesc Fiol, para beneficiar al arquitecto Santiago Calatrava y sacar rédito político, según la Fiscalía.

Ninguno de los diferentes informes emitidos por los servicios jurídicos de la Comunidad Autónoma avala que la contratación tuviera o pudiera hacerse por adjudicación directa, recalca la Fiscalía en su escrito de petición de fianza civil relativo a la que es la pieza número 3 del "caso Palma Arena".

El documento, entregado el viernes al juez que instruye el caso, está firmado conjuntamente con la acusación particular de la Comunidad Autónoma y en él se pide una fianza civil de 1,6 millones de euros para el expresidente Jaume Matas.

"Todo el expediente de contratación (de la ópera) no es más que un montaje", afirma la Fiscalía, que argumenta porqué de esta acusación aportando fechas y hechos que apuntan a que las bases del contrato se pactaron mucho antes de lo que pretendió hacerse ver.

La Fiscalía subraya que no existe estudio económico del proyecto ni sobre su ubicación ni tampoco hay un "mínimo" análisis sobre la viabilidad física del mismo, en una zona que "ni siquiera es titularidad de la Comunidad Autónoma".

"De forma unilateral"

Por ello, considera que fue el expresidente del Govern el que, a principios de 2007, decidió "de forma unilateral" que durante la campaña electoral de ese año presentaría un gran proyecto para Palma "con la única y exclusiva finalidad de favorecer sus intereses propios como candidato a la Presidencia".

El objetivo de Matas era dar "un golpe de efecto" que le beneficiase en las urnas pero el coste del mismo decidió "repercutirlos a la Comunidad Autónoma" siendo, a juicio de la Fiscalía, "plenamente consciente de la práctica imposibilidad material e inmaterial económica del proyecto".

Matas habría contactado para ello, en febrero de 2007, con Calatrava, con el que, en una cita en Roma, habría fijado un acuerdo "verbal" para que fuera él el que pusiera firma al proyecto del palacio de la ópera.

En este acuerdo ya se habría hablado del coste (1,2 millones de euros) por el anteproyecto, un trabajo que no se presentó nunca ante el Govern y que el pasado 9 de febrero Calatrava entregó en los juzgados.