El Festival de Música en las islas no capitalinas arranca hoy en la provincia de Santa Cruz de Tenerife con el concierto que ofrecerá el grupo Sphera Antiqva, que propondrá en La Gomera una velada dedicada a la música de Latinoamérica, un repertorio que rara vez ha estado representado en las programaciones del ciclo canario.
"Barroco Amazónico: cuando la selva se hizo música" es el título del concierto que el octeto ofrecerá a partir de las 20:30 horas en la Casa de la Cultura de Valle Gran Rey. En la primera parte podrán escucharse piezas bolivianas anónimas del periodo barroco, entre ellas unas "Folías" de 1750 o la "Pastoreta Ychepe". La velada de completará con una segunda serie de obras de autor desconocido entre las que figuran el motete "In hac mensa novi Regis", la Sonata VI ( AMCh 266) y "Quisme a te sponse separabit".
Estas composiciones se ofrecerán en las voces e instrumentos de Pablo Gutiérrez y Javier Ulises (violines), María Hinojosa (soprano), Florian Cousin (traverso y flauta dulce), Keiko Gomi (violonchelo), Hémera Rodríguez (contrabajo), Miguel Rincón (tiorba y guitarra barroca) y Daniel Garay (percusión).
Otros escenarios
Un total de cuatro conciertos componen la propuesta musical que se desarrollará en los dos próximos meses en la Isla Colombina. Tras Sphera Antiqva, la Camerata Clásica de Canarias actuará el próximo lunes en el Auditorio Insular Infanta Cristina de San Sebastián, mientras que el Dúo Océano tendrá su cita en la Casa de la Cultura Pedro García Cabrera de Vallehermoso el 25 de este mismo mes. La Orquesta de Cámara del Teatro Nacional de Praga cerrará los conciertos el 1 de febrero en la capital de la isla.
Cabe resaltar que Sphera Antiqva llega a La Gomera precedida por el éxito obtenido en los dos primeros conciertos, celebrados el pasado sábado en La Graciosa y anteayer, domingo, en La Cueva de Los Verdes de Lanzarote.
La iglesia del Carmen en La Graciosa se vio desbordada con la asistencia de alrededor de 250 personas, por lo que algunas de ellas tuvieron que ver el concierto de pie. La interacción entre los artistas y el público fue constante y, al término de la audición, miembros del público, especialmente los niños, se acercaron a charlar con los músicos. En la Cueva de Los Verdes fueron unas 170 las personas las que acudieron a escuchar el concierto.