Ha faltado tiempo para que a Francisco Linares, alcalde de La Orotava, le salgan detractores por su propuesta de cobrar medio euro -cantidad ridícula- a los turistas que accedan al Parque Nacional del Teide. También ha contado a su favor con la opinión de varios primeros ediles del Norte de la Isla, la verdad sea dicha, pero el regidor de Los Realejos, que también es el presidente insular del PP, ha dicho que ni hablar.

Los argumentos de Manuel Domínguez son los de siempre en estos casos. Que no le podemos poner más obstáculos a nuestra principal fuente de ingresos, que si en vez de mejorar la oferta planteamos nuevas trabas mal nos irá, que vamos a lograr un efecto contraproducente, que una tasa por visitar el Teide ni nos va a sacar de la crisis ni va a solucionar los problemas de la Isla...

A mí la gente del PP cada día me maravilla más. Lleva varios días clamando Cristina Tavío contra lo que considera, con datos en la mano, una subida de impuestos desmesurada en el Ayuntamiento de Santa Cruz. Corporación municipal de la que se considera alcaldesa de derecho porque para eso iba en el número uno de la lista más votada. Ahora bien, como le dijo Vicente Álvarez en un programa de EL DÍA Televisión el pasado lunes, ¿por qué no le hace la misma recomendación a su partido en Madrid, concretamente al ministro de acienda, a ver si conseguimos que nos moderen un poco el IRPF y otros tributos que nos tienen literalmente fritos? Pregunta de bobo porque lo que pretende la señora Tavío no es que los ciudadanos de Santa Cruz vivan mejor -eso es colateral-, sino desgastar a José Manuel Bermúdez.

Lo mismo cabe decir del mencionado mandatario realejero. Si las tasas turísticas ahuyentan al visitante, ¿a cuenta de qué la reticencia que mantuvo en su día el PP, esta vez con la ministra de Fomento como protagonista, a cuenta de las tasas aeroportuarias? Más aún: ¿no fue José Manuel Soria, ministro de Industria, Turismo y demás, amén de presidente regional del partido, quien aseguró que esas tasas no tenían efecto sobre la llegada de turistas a Canarias? Parece que algo sí influyen porque en caso contrario la señora Pastor no se hubiera dado tanta prisa por recortarlas en el aeropuerto de Barajas en cuanto sus cifras de pasajeros cayeron acusadamente.

No acaban aquí las incongruencias del alcalde Domínguez. Una tasa por visitar el Teide no va a solucionar los problemas económicos de esta Isla. En eso tiene toda la razón del mundo, aunque para llegar a semejante conclusión no hace falta ir a Salamanca. Me contento sólo con crear entre 100 y 200 puestos de trabajo que a su vez, por efecto del consumo, creen otros 100 ó 200 más. Cuatrocientos parados menos no vienen mal a unas Islas con casi 400.000 desempleados. Algo difícil de entender, eso parece, por cualquier político con los garbanzos asegurados. Por cierto, los gringos llevan tantos años ahuyentando al turismo con tasas por visitar sus espacios naturales, que siguen estando a la cabeza mundial en este sector. Ay.

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