El presidente canario, Paulino Rivero, ofreció al líder del PP, Mariano Rajoy, su máxima colaboración, respeto y lealtad institucional, aunque también está convencido de que las primeras decisiones del próximo Gobierno incluirán medidas de "ajuste drástico" porque "no hay varitas mágicas".

Así lo afirmó ayer el presidente canario al explicar que conversó con Mariano Rajoy para felicitarle por el triunfo electoral del PP en los comicios generales del domingo y para ofrecerle la máxima colaboración, lo que fue "mutuo".

Rivero expresó además a Rajoy su voluntad de trabajar "desde la cooperación y la colaboración para abordar los retos" porque, añadió, el marco económico es complejo y difícil y los datos auguran "tiempos de máxima dificultad".

Rivero está "absolutamente convencido" de que en las horas siguientes a la toma de posesión del próximo Ejecutivo central se anunciarán "las primeras medidas de ajuste drástico y nos daremos cuenta de que una vez pasado el periodo electoral, aquí no hay varitas mágicas".

Esto irá en contra de todas las expectativas "que algunos se habían creado de que cambiando el Gobierno cambian las cosas y empieza la actividad económica", puesto que la crisis es "más profunda, afecta a todo el mundo desarrollado y está causando estragos en Europa. Está tumbando gobiernos sean del signo político que sean", comentó.

El presidente canario señaló también que, previsiblemente, el paro "se disparará" hasta los cinco millones y medio de desempleados en España durante el primer semestre de 2012 y reiteró que en momentos de dificultad, hay que buscar la máxima colaboración institucional con respeto y lealtad institucional, cada uno desde su ámbito competencial, para contribuir "a mejorar las condiciones en las que nos movemos".

Presupuestos

Ante la posibilidad de que haya que modificar los presupuestos para 2012, Rivero señaló que el Gobierno de Canarias efectuó una previsión, al igual que otras comunidades autónomas, de acuerdo a los criterios de transferencias comprometidas por el Estado que fueron comunicadas previamente.

Ahora bien, advirtió de que habrá que esperar a las primeras medidas que tenga que adoptar el próximo Gobierno de España.

"Si las exigencias de Bruselas van en la dirección de que España tiene que ajustar de nuevo el gasto público, eso producirá un efecto cascada, pues habrá menos recursos para las comunidades autónomas, diputaciones, cabildos y ayuntamientos", alertó.