Al menos un millar de ciudadanos chinos residentes en el Archipiélago han decidido hacer las maletas para retornar a su país de origen. Las pérdidas que sufren los negocios que regentan debido a la crisis provocada por el coronavirus ha impulsado a muchos de ellos a cerrar de manera definitiva sus empresas y volver a China, donde la situación de la pandemia está más controlada y existen menos restricciones para desarrollar algunas actividades comerciales que en España están siendo muy castigadas.

Así lo evidencia el presidente de la Asociación Comercial y Turística de China con Canarias, Chen ZhiBin, que asegura que más de 50 familias se han puesto en contacto con el colectivo que dirige para solicitar información acerca de los trámites necesarios para regresar. “Hay bastantes que han vuelto y otros nos han pedido ayuda para saber cómo lo pueden hacer”, explica.

Chen indica que a los que han decidido retornar por la mala deriva económica de las Islas, se unen aquellos que buscan viajar a China para acceder antes a la vacuna. Para ser inmunizado en el país asiático basta con tener un pasaporte chino y solicitarlo en la oficina de extranjería, ya que la vacunación es gratuita. “Es más fácil, más rápido y está mejor organizado”, valora. De los que se marchen “unos volverán y otros no”, pero asegura que como mínimo pasarán seis meses allí, ya que tienen que afrontar un desembolso económico importante para viajar y cumplir con las estrictas cuarentenas que impone el país.

Este empresario de la restauración asegura que en estos momentos retornar a China no es barato. Mientras que antes de la pandemia podían conseguirse billetes de ida vuelta por entre 500 y 600 euros, ahora se debe pagar más de esa cantidad solo por el viaje de ida. Además, los viajeros deben pasar al llegar 14 días de cuarentena en hoteles controlados por el Gobierno, en los que deben pagar por su estancia y manutención. Al trasladarse a su diferentes provincias de origen deben guardar otros 14 días de cuarentena y someterse a varios test. “Si algún compañero del avión da positivo tienes que aislarte otros siete días”, comenta.

En Canarias a principios de 2020 había 10.825 residentes con nacionalidad china, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE). Una población extranjera que no ha dejado de aumentar en el Archipiélago desde hace al menos veinte años, cuando apenas residían en las Islas un millar de ciudadanos de este país asiático. Por islas, Tenerife es la que tiene una mayor cuota, 4.495 ciudadanos chinos, seguida de Gran Canaria, donde viven 3.948. Su presencia en el resto de las islas es más limitada, siendo más numerosa en Lanzarote, con 1.623, mientras que en el resto no supera las 700 personas.

Sin embargo, Chen advierte de que en el Archipiélago puede haber más ciudadanos chinos residiendo, una cifra que el calcula que estará entorno a 20.000. De ellos, la mayor parte son empresarios o autónomos, ya que asegura que en su ADN tienen inculcado esta forma de ganarse la vida. “Si trabajas para otro solo tienes dos manos, pero si tienes empleados tienes muchas manos para ti”, apunta.

Los ciudadanos chinos no son ajenos a las consecuencias de la crisis. En enero había en Canarias 845 afiliados chinos menos en la Seguridad Social, frente a los que había antes de la pandemia.

También demandan ayudas

Los empresarios chinos que resisten la crisis en el Archipiélago echan de menos un mayor apoyo de las administraciones al tejido económico. El contacto con sus compatriotas que residen en otros países del entorno europeo les provoca cierta envidia al ver como muchos han aportado ayudas directas a los negocios más afectados, mientras que en España todavía no se han concretado. El presidente de la Asociación Comercial y Turística de China con Canarias, Chen ZhiBin, asegura que a sus compañeros “no les salen las cuentas”, sobre todo a aquellos cuyas empresas están enclavadas en zonas turísticas. “La mayoría cerró antes de la declaración del estado de alarma y no han vuelto a abrir”, comenta. Por eso, la decisión de muchos de sus compatriotas es retornar a China.