Mo Dauda llegó al Tenerife el pasado verano con el cartel de futbolista diferencial. Le había bastado solo una temporada en Segunda División, la 2021/22, para ganarse esa condición. Después de anotar nueve goles y repartir tres asistencias con el uniforme del Cartagena, se propuso dar un paso más en otro equipo, el blanquiazul. Pero esa intención no se vio respaldada por una campaña regular. Solo pudo a encadenar cinco jornadas como titular, las iniciales. A partir de ahí, las lesiones y su insuficiente adaptación al rigor táctico exigido por Luis Miguel Ramis, condicionaron la trayectoria de un jugador que, pese a todo, cerró la Liga con cuatro tantos. Es más, terminó siendo el blanquiazul con el mejor promedio de minutos y goles.
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Dauda jugó 27 partidos, once de ellos como titular, y participó en la competición liguera durante 1085 minutos; es decir que su promedio de anotación equivale a un gol cada tres encuentros completos (271’). En su caso, las apariencias engañan, dado que fue el encargado de abrir la cuenta colectiva, el 13 de agosto en Ipurua (1-2), y también el que clausuró el capítulo realizador, el viernes en Zaragoza (1-1). En medio solo pudo dejar su sello en el derbi de la primera vuelta, maquillando la goleada amarilla con una diana intrascendente –noviembre–, e impulsando la única remontada del curso, la lograda el 20 de mayo en el Heliodoro con el Burgos como rival.
La adaptación.
De entrada, Ramis intentó encajar a Dauda en el puesto de extremo, pero la apuesta no resultó del todo convincente. La respuesta táctica del ghanés, principalmente dentro de la fase defensiva, fue insuficiente. Al menos, esa fue la conclusión de los técnicos después de que Mo fuera titular en las cuatro primeras jornadas de Liga. En la quinta cayó lesionado. A los 10 minutos del encuentro con el Ibiza, en Can Misses, un golpe en la espalda le provocó una lesión poco habitual en un futbolista, la fractura de las apófisis de la vértebras segunda y tercera. Durante su período de baja se fue asentando la alternativa de Waldo como extremo zurdo. A su regreso, cuatro partidos más tarde, el papel de Dauda pasó a ser secundario. Tuvo minutos en casi todos los encuentros posteriores, pero casi nunca como titular. Para colmo, se vio obligado a entrar de nuevo en la enfermería, esta vez por la rotura del recto anterior del muslo derecho sufrida 18 de febrero en el Tenerife-Mirandés.
Dos meses después, cuando solo quedaban siete jornadas para el final de la Liga, volvió a las convocatorias. Reapareció en El Alcoraz y repitió como reserva en los cuatro encuentros siguientes. En el último fue decisivo para que el Tenerife se impusiera al Burgos y Ramis decidió darle el premio de su presencia en la alineación titular en la visita a La Romareda (1-1).
Un nuevo papel.
En esta última etapa, Ramis optó por asignarle a Mo otra función. No había cuajado como extremo, pero sí podía funcionar en una posición más centrada y cercana al área, con una menor responsabilidad en las tareas defensivas. Casualidad o no, de esa manera pasó de tener dos goles a acabar el curso con el doble gracias a sus aciertos en los citados duelos con el Burgos y el Zaragoza. «Se mueve rápido en los espacios reducidos, es muy potente y es ganador en carrera, así que pensamos que iba a rendir mejor si estaba más cerca del área y se liberaba un poco más del trabajo defensivo», explicó Ramis, convencido de que Dauda debe«exigirse muchísimo más» en los entrenamientos. «Si lo hace, se verá de verdad al jugador importante que es, porque en esta temporada se han visto destellos», apuntó.
Lesión y vacaciones.
La felicidad no fue completa para Dauda en el partido de la última jornada de Liga. Jugó como titular por primera vez en 2023 y marcó el gol que le dio el empate a su equipo, pero tuvo que pedir el cambio justo después de batir a Cristian Álvarez con un espectacular remate. El motivo, un esguince de tobillo, tal como aclaró el club en un parte médico. Dauda tiene por delante las vacaciones para recuperarse antes de iniciar la pretemporada como blanquiazul el 6 de julio.
Propiedad del Tenerife.
Dauda tiene contrato con el club tinerfeño hasta junio de 2026. En la operación comandada hace poco más de un año por Juan Carlos Cordero, director deportivo de la entidad blanquiazul en ese entonces, se acordó con el Anderlecht una cesión por un curso y una posterior incorporación en propiedad. Juan Guerrero, consejero deportivo del Tenerife, confirmó recientemente que el representativo debe cumplir con unos pagos anuales con el equipo belga.