CD Tenerife

El CD Tenerife espera cerrar este mes el fichaje de Manu Fajardo

El profesional adscrito al Rayo Vallecano sigue siendo el preferido por el consejo de administración para suplir a Cordero

Paulino Rivero, junto a los nuevos refuerzos.

Paulino Rivero, junto a los nuevos refuerzos. / CD Tenerife

Manoj Daswani

Manoj Daswani

El consejo de administración y la propiedad del CD Tenerife están de acuerdo en la contratación, a la mayor brevedad posible, de un director deportivo que subsane la salida (a petición propia) de Juan Carlos Cordero, vinculado a principios de enero con el Real Zaragoza. Desde entonces, su despacho en las oficinas del Heliodoro ha quedado vacante y su trabajo lo ha asumido una comisión deportiva encabezada por el consejero Juan Guerrero, que fue el encargado de pilotar las negociaciones para traer a los dos refuerzos invernales, Durmisi y Kike Salas; y de dar explicaciones (junto a Santiago Pozas) el pasado miércoles al cierre del mercado de enero.

El favorito para asumir el puesto de Cordero sigue siendo Manuel Fajardo Mateo, el profesional escogido por la directiva incluso antes de que se produjese la desvinculación del ejecutivo cartagenero, que había expresado su voluntad de marcharse a comienzos de la presente temporada, por tanto mucho antes de que su adiós fuese efectivo. La sintonía y las buenas relaciones del actual consejo con el adjunto a la dirección del Rayo Vallecano siguen absolutamente vigentes; y todo apunta a que el acuerdo para su venida podría sustanciarse a lo largo de este mes de febrero.

En el club explican que no existía la necesidad perentoria de cubrir esta vacante con el mercado ya abierto, puesto que la mayoría de negociaciones para los refuerzos de enero se emprenden con mucho tiempo de antelación; y lo mismo ocurre con los del verano, que empiezan a apalabrarse con varios meses de previsión. Un buen ejemplo es la contratación de Mo Dauda, por la que Cordero admitió que llevaba medio año de conversaciones con el jugador y su agente antes de hacerla efectiva en la última ventana estival.

De Manu Fajardo convence su experiencia en Primera y Segunda División, su conocimiento de la categoría, su ambición y su manejo de las nuevas tecnologías, en la cuales es especialista el actual ayudante de Cobeño en el Rayo. Si bien su club no quiso dar facilidades para su desvinculación en pleno mercado y con varias operaciones abiertas por su parte, ahora ya parece más viable que le den vía libre a su salida. La última palabra la tendrá el presidente de los vallecanos, Raul Martín Presa.

Fajardo dio sus primeros pasos en el fútbol profesional de la mano de la empresa Emmart Soccer, que dirige el representante Eduardo Llanos; y a renglón seguido participó de la mejor etapa de la AD Alcorcón, fue jefe de captación del Levante UD, tuvo una breve experiencia en el Racing de Santander (abortada a los 21 días) y recibió la llamada de un Primera para ser mano derecha de Cobeño en el pujante proyecto de los franjirrojos. Justamente su importancia en el club madrileño produjo alguna aspereza en la negociación para su salida y posterior incorporación al Tenerife, que en el club confían que se produzca sin más sobresaltos. Si se cumple la hoja de ruta de los jerarcas locales, su llegada y presentación están muy próximas.

Pozo fue la última aspiración del mercado invernal

El Tenerife manejó varias opciones para apuntalar su delantera, si bien ninguna llegó a derivar en un fichaje para el ataque blanquiazul. Una de las últimas negociaciones que mantuvo abiertas la comisión deportiva fue por el talentoso jugador José Pozo, que milita en el Rayo Vallecano y también recibió el día 31 una suculenta oferta del fútbol catarí. Finalmente optó por quedarse en Vallecas. En el cuadro madrileño milita justamente el hombre elegido para ocupar próximamente la dirección deportiva del representativo, Manu Fajardo. Antes que por Pozo, también se fueron al limbo las gestiones por Karrikaburu (prefirió al Leganés), Loren Morón (fichado por Las Palmas), Manu Vallejo (al que su predilección por Cervera llevó al Real Oviedo)y Dani Gómez, en este caso por decisión del futbolista cuando las otras dos partes de la operación, Levante y Espanyol, habían dado su visto bueno.

El Tenerife también sondeó a Sergio Castel, cuya contratación desestimó porque no satisfacía plenamente las exigencias del entrenador y finalmente firmó por el Burgos. El club cierra esta ventana con dos incorporaciones y dos desvinculaciones; y con margen salarial para hacer algún movimiento si existiese alguna opción interesante en el mercado de jugadores libres. En todo caso, parece complicado que haya nuevas altas. La plantilla queda cerrada.