La presencia de Nahuel Leiva en el banquillo fue una de las grandes noticias que dejó la tarde de ayer en Anduva. El futbolista rosarino ya estaba disponible desde hace días –con el alta hospitalaria y entrenando con normalidad con el grupo– pero Ramis prefirió reservarle el día del partido contra el Ibiza y abogar por la prudenca. Ayer, al fin, el atacante blanquiazul volvía a una convocatoria del representativo más de 600 días después de la última vez. Según Juan Carlos Cordero, director deportivo del representativo, será «como un refuerzo más» de los que firmados por el Tenerife en el mercado invernal. El argentino estaba a punto de salir del club en verano cuando una muy grave lesión frustró su salida y le apartó de la rutina diaria con el equipo. En situación muy semejante ha estado durante este tiempo el centrocampista Javi Alonso. El isleño también viajó a Miranda de Ebro pero, tal y como estaba previsto, fue el último descarte de Ramis. La intención era que se desplazara con sus compañeros para irse integrando en la dinámica del grupo, si bien no está aún para jugar.