El CD Tenerife se ha visto obligado a modificar de forma radical sus planes para esta semana después del aplazamiento de la visita al Mirandés, prevista para mañana a las 18:00 horas. Para empezar, Luis Miguel Ramis ha concedido un día de descanso a sus jugadores (el de hoy) y queda cancelado el desplazamiento a Vitoria de esta tarde. Así, los blanquiazules prepararán su siguiente compromiso en la Isla y viajarán a tierras peninsulares el viernes para jugar al día siguiente (13:00 horas) en Las Gaunas contra la UD Logroñés.

Aplazamiento.

Todo esto ha sucedido después de que el Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) aceptara suspender el Mirandés-Tenerife, debido al brote de covid-19 que afecta ya a trece componentes del conjunto burgalés. LaLiga hizo oficial el aplazamiento del encuentro horas después de que las pruebas médicas a las que ha sido sometido el grupo rojillo ampliara de seis a trece el número de positivos que los test de antígenos previos al Rayo-Mirandés habían detectado.

Controlar el foco.

Jugadores y cuerpo técnico del conjunto de Anduva seguirán sometiéndose a estos exámenes a diario “con el fin de mantener un control en la extensión del foco”, según reza el comunicado emitido por LaLiga. La situación sanitaria de la plantilla mirandesista seguirá en evaluación para determinar si puede afrontar la siguiente jornada liguera, prevista en su caso para el domingo a las 13:00 horas ante el Sporting de Gijón en el estadio El Molinón-Enrique Castro Quini.

Reordenar el calendario.

La nueva fecha de celebración del encuentro se comunicará en los próximos días, aunque la existencia de otra jornada intersemanal a mediados de mayo invita a pensar en que será durante este mes de abril cuando el Mirandés empiece a recuperar estos dos compromisos aplazados ante el Rayo Vallecano y el Tenerife. Para llevar a efecto este plan, el primer paso sería que los de José Alberto López pudieran retomar la competición esta misma semana. Sería con la merma de efectivos correspondiente, aunque resulta imposible concretarla.

En los comunicados del club burgalés se refiere, sin detallar, a “jugadores y miembros del staff que forman parte del primer equipo”, elevando a 13 el número de afectados en el que emitió ayer por la mañana. Además, se anunciaba “la suspensión temporal de la actividad deportiva habitual del primer equipo”, ya vigente desde el pasado viernes.

El Tenerife fue inmediatamente informado para que suspendiera el desplazamiento a tierras burgalesas, tal y como había pedido Ramis después del derbi canario: “El trabajo de base está hecho y tenemos recursos en la plantilla para preparar el partido. Imagino que estarán acotando el origen del coto de infección, pero nos dirán este lunes si viajamos”.

Primero, la salud.

Desde que conoció el aplazamiento, la entidad blanquiazul deseó una “pronta recuperación” a todos los afectados y se puso a disposición del Mirandés, cuyo consejo de administración “continúa en coordinación con las autoridades sanitarias competentes en aras a proteger la salud de todas las personas implicadas”, según expresó en otro texto oficial.

Ruiz y Sipcic, bajas.

Carlos Ruiz y Sipcic vieron la quinta cartulina amarilla ante la UD Las Palmas y deberán permanecer inactivos hasta la visita del Sporting el viernes 9 de abril, puesto que la suspensión de un encuentro que les impondrá el Comité de Competición la cumplirán contra la UD Logroñés el sábado en Las Gaunas. Bruno Wilson y Alberto Jiménez ocuparán el centro de la zaga ese día. La alternativa es Álex Muñoz. Esto supone un contratiempo en los planes de Luis Miguel Ramis, que siempre pidió no concentrar sanciones en un puesto.

El Tenerife, sin positivos

El CD Tenerife es de los pocos equipos de la Liga Smartbank que no ha tenido un solo positivo por covid-19 en sus filas desde que arrancó la competición. Los blanquiazules solo sufrieron uno, el de Elliot, pero fue en periodo vacacional. Además, Otar Kakabadze estuvo aislado por contacto estrecho después del parón FIFA del mes de noviembre. Dio negativo en todos los test y, tras el pertinente periodo de cuarentena, regresó a la dinámica del grupo. La Liga entra ahora en su fase decisiva y, según la normativa, a partir de la jornada 34 no se podrán solicitar aplazamientos. Sí que podría haberlos en casos como el del Mirandés, pero la iniciativa partiría del organismo que preside Javier Tebas. Cada club tenía hasta esa fecha dos balas para pedir suspensiones.