El CV Haris se despide de un año difícil y atípico, con la suspensión de la temporada 19/20 y alterando el devenir de la siguiente. “Creo que la dinámica que tenía el equipo iba en línea ascendente, que podíamos luchar por los playoffs, nos quedamos a las puertas de saber cómo llegaríamos al tramo final”, valora David Martín, presidente de la entidad tinerfeña en su balance del año.

Dadas las circunstancias, “quizás el 2020 sea el año más difícil para valorar”, pero también hubo buenos momentos y resultados alentadores. “Estamos clasificados entre los primeros y somos semifinalistas directos en la Copa de la Reina. Creo que es algo muy positivo a pesar de las dificultades, sobre todo, con las que nos hemos encontrado en el mes de diciembre, con los positivos por Covid-19 y con las continuas pruebas PCR”, admite el dirigente.

Martín lamenta que la cantera blanquiazul se haya visto “afectada por no poder entrenar”, pero entiende que “hay que acatar las normas”. Además, el Sanaya Libby’s también perdió a uno de sus pilares: la afición. “Lo que más nos duele es jugar los partidos en el Pablos Abril sin público. Es lo más desolador y triste que hemos vivido en esta nueva normalidad”, lamenta. Por eso, espera que en 2021 “la grada pueda disfrutar del buen voleibol que están desplegando las chicas, que es digno de ver en la cancha”.