De forma merecida, pero con aspectos por mejorar. Txus Vidorreta, técnico del Iberostar, reconoció que la victoria contra el Betis llegó tras "un partido difícil y duro", tal y como esperaba. "Han tenido toda la semana para preparar el encuentro y lo han hecho, reduciendo nuestra producción en el triple. Salieron muy concentrados, haciendo un buen trabajo y su ventaja ahí era justa. Luego mejoramos el tono defensivo, con Doornekamp sobre Kay, y ya en el segundo tiempo dominamos pese a no mantener las ventajas logradas", expuso a modo de resumen el técnico aurinegro. "Lo hemos resuelto con apuros, pero de manera justa tras dominar desde el minuto 25", añadió el bilbaíno.

En definitiva, Vidorreta dijo estar "muy satisfecho por la victoria", ya que los suyos fueron capaces de "parar una minirracha negativa que solo ha durado dos partidos". Una victoria que, sin embargo, no esconde, varias deficiencias. Una el rebote defensivo, si bien el técnico aclaró que "por mucho que te reboteen si luego no anotan, no tiene gran relevancia". Pero en especial se lamenta Txus de las posesiones que desperdicia. "Tenemos que mejorar en que los manejadores del balón no regalan pérdidas innecesarias; porque cuando lo hagamos seguramente seamos capaces de mantener esas ventajas que habitualmente no conservamos; y ellos lo saben", dijo en relación a Huertas, Fitipaldo, Butterfield y Salin. También a título individual, Vidorreta destacó los buenos minutos "en defensa" de Guerra, que "está creciendo y afianzándose como un sustituto de garantías de Shermadini". "Pero tiene que seguir trabajando ya que queda mucho por delante", dijo del teldense.

Por su parte, Marcelinho Huertas admitió que su equipo "nunca" estuvo "a placer", y coincidió con su técnico en que "las pérdidas es un tema a mejorar". "Venimos de unos cuantos partidos con este problema, sobre todo en mi caso", admitió el paulista. "Lo más importante era ganar, al final tuvimos tranquilidad, y sacamos adelante el partido", añadió.