La UDG Tenerife se encamina a la que será su séptima temporada consecutiva en la máxima categoría del fútbol femenino nacional. Lo hace con un nuevo cuadro técnico encabezado por alguien de la casa, el tinerfeño José Herrera, un profesional que llegó al club como ayudante de Toni Ayala, en la campaña del ascenso, y que también trabajó con Antonio González, Pier Cherubino y Francis Díaz. Después de una etapa fuera de la Isla, en la que se puso al frente del Málaga y del Granada, regresó al club blanquiazul en la mitad del curso 2021/22 para desempeñar la función de segundo entrenador.

Siguiendo la línea descrita desde el origen de dar oportunidades a técnicos canarios, la UDG Tenerife se decantó por Herrera después de la decisión de Francis de continuar su carrera en el Betis. «No lo dudamos», comentó el presidente Sergio Batista anunciando el vínculo hasta junio de 2024.

Apuesta coherente, dentro de la política del club, y discurso a esa misma altura por parte de Herrera, quien marcó el objetivo de «tratar de sumar el mayor número de puntos lo antes posible para certificar matemáticamente la permanencia». Eso sí, tampoco puso límites. «Ojalá lo logremos, y si es así, tendremos diferentes miras, pero, por lo que somos, por el contexto y por la humildad que nos caracteriza, tenemos claro que debemos cerrar la permanencia lo antes posible», insistió el técnico.

En cuanto al estilo, apuntó que lo marcarán las «características» de unas futbolistas que se han ganado el respeto de la competición con su entrega constante. «Por algo las llaman las Guerreras», comentó José. «Los canarios le tenemos respeto a todo, pero no le tenemos miedo a nada», advirtió.

El grupo de trabajo de Herrera estará formado por Adrián Fumero (segundo), Pablo Borges (preparador físico), Miguel Aquino (analista), Domingo Hernández (entrenador de porteras), Daniel Castilla (asistente), Pili González (jugadora hasta la pasada campaña y ahora asistente), Paula Montero, Nicolás García (fisioterapeutas) y Daniel Morales (readaptador físico).

El Granadilla retomará la actividad tras las vacaciones de verano con una «pretemporada lo mas competitiva posible» y la previsión de realizar una concentración fuera de la Isla para jugar partidos.

Dudas con el Trofeo Teide.

Aunque la organización anunció que la final femenina iba a medir a la UDG Tenerife con el Barcelona el 27 de agosto, el club aclaró que la visita azulgrana no es segura.