La crisis sanitaria ha vuelvo a colocar al sector cultural en una situación extrema. La pandemia ha llegado para sacudir los cimientos de una estructura profesional tristemente acostumbrada a la precariedad. Eso no impide que hayan decidido unirse para buscar estrategias e ideas para tomar impulso y sacar lo mejor de esta etapa nefasta. El salón de actos de TEA Tenerife Espacio de las Artes acogió ayer el arranque de las jornadas La gestión cultural. Retos del entorno incierto y soluciones.
El proyecto, que nace de la colaboración entre la sala de arte contemporáneo del Cabildo de Tenerife y la Escuela de Arte Pancho Lasso y que cuenta con el patrocinio del Gobierno de Canarias, se articula en torno a cinco mesas formadas por expertos de la gestión cultural con experiencia local, nacional o internacional que, desde sus diferentes perspectivas y experiencias, proporcionarán a los trabajadores del sector “claves sobre los retos actuales del entorno, las enseñanzas que se derivan del mismo, los objetivos posibles y las estrategias para alcanzarlos”, explicaron.
La agenda arrancó ayer en la instalación santacrucera y continuará mañana en la sede que la escuela de arte tiene en la capital de Lanzarote, Arrecife. Los profesionales de la cultura aprovecharon para reivindicar su papel social y económico. Ven necesaria una lectura positiva al entender que, como siempre han hecho a lo largo de la historia, deben situarse a la vanguardia y liderar los cambios necesarios para adaptarse a las nuevas circunstancias.
El gestor cultural Jorge Bernárdez fue el encargado de dar la bienvenida a los asistentes de la jornada. La mayoría de ellos lo hicieron a través del canal habilitado en internet dadas las restricciones sanitarias vigentes en Tenerife. De hecho, muchos de los ponentes intervinieron también por esta vía desde sus lugares de residencia, desde Barcelona hasta la lejana Australia, por poner solo dos ejemplos.
Bernárdez no quiso dejar escapar la ocasión de recordar al recientemente fallecido Alberto Delgado, gestor cultural y presidente de la Fundación CajaCanarias. “Su amplísima trayectoria y su profesionalidad harán que siga siendo un referente para todos nosotros”, aseguró.
Durante toda la mañana fue desfilando por TEA un nutrido grupo de expertos en todos los ámbitos de la gestión cultural. Lo hicieron en persona o por videoconferencia con el mismo objetivo: “descubrir sus opiniones y experiencias, desde el ámbito local hasta el internacional, y ver qué estrategias y soluciones han encontrado. Esperemos que nos sirva de inspiración y aporten algo de luz”, dijo el coordinador. “Parece que estamos siempre en crisis y ahora se une la tradicional situación económica a una pandemia sanitaria. No obstante, el efecto es siempre el mismo: estamos entre los más afectados, nos consideran un sector subvencionado y nos tildan de pedigüeños”, añadió.
La primera de las mesas reunió, de forma virtual, a varios representantes de museos, las artes visuales y el patrimonio de todos los puntos del planeta. Todos coincidieron en que la nueva crisis ha “desnudado” los problemas que ya arrastraba una industria a la que tradicionalmente no se le ha dado su lugar.
El encuentro continuará mañana en Lanzarote con dos mesas dedicadas a la música en vivo
Entre los datos que se facilitaron está le hecho de que por cada 1,3 euros públicos que se invierten en cultura, se generan otros 3,4 euros. Se trata, insistieron, de una industria generadora de empleo de calidad, especialmente entre los más jóvenes, que beneficia a muchos otros sectores como el turismo o los eventos y es fuente de cohesión y avance social. “Aportamos mucho más al PIB que otros sectores que están mucho más subvencionados que nosotros como el automovilístico o la agricultura”, insistieron.
Concretamente, el primero de los encuentros de la jornada contó con el director general de la Fundación Pau Casals y socio-fundador de Nartex Barcelona, Jordi Pardo; el investigador y analista del gobierno australiano en Adelaida, Luis Lafosse; la curadora y directora general de la Han Nefkens Foundation, Hilde Teerlinck, y la directora del Museo y Parque Arqueológico Cueva Pintada, Carmen Gloria Rodríguez Santana. Juntos se plantearon interrogantes como qué es lo que se aprendido de la situación derivada de la pandemia o cuáles son las posibles soluciones para sortear la crisis sobrevenida. Entre las herramientas que podrían servir para relanzar al sector está el fomento de la transversalidad y la necesaria reflexión sobre los nuevos esquemas de relación con el público. Los museos, por ejemplo, no deben considerarse solo un lugar para la visita donde las cifras sean lo primordial, sino un espacio para la experiencia.
La pandemia ha obligado a adelantar un trabajo que hace tiempo debió afrontarse: el aprovechamiento de los canales digitales y las nuevas tecnologías. Recuerdan, asimismo, que en el caso de la cultura la financiación no debe ser vista como un gasto sino con una inversión. Además, es necesario que la actividad forme parte de cualquier planificación que se realice en una ciudad como parte de la estrategia competitiva y turística. “Debemos entrar en un mundo más honesto donde no importen tanto las cifras de visitas sino las experiencias”, insistió Pardo.
En la siguiente mesa, dedicada a la industria audiovisual, del libro y de la música grabada, participaron la poeta y editora palmera Elsa López; la directora del Palacio Vista Alegre de Madrid, Daniela Bosé; el gerente del Cluster Audiovisual de Canarias, Jairo López; y el coordinador de las jornadas, que actuó como moderador. A continuación fue el turno de las artes escénicas con el director del Centro Coreográfico de La Gomera, Martín Padrón; la directora del Centro Cultural Conde Duque, Natalia Álvarez Simó; el director artístico de Auditorio de Tenerife, José Luis Rivero, y el director del Club TRESC Comunidad de Cultura, Pepe Zapata, que ejerció en este caso de moderador.
Las jornadas continuarán mañana en el salón de actos de la sede que la Escuela de Arte Pancho Lasso tiene en la capital conejera. Arrancarán a las 9:45 horas con dos mesas dedicadas a analizar la situación que vive la música en vivo, uno de los sectores culturales más afectados por las limitaciones sanitarias. El encuentro incluye la presentación de casos prácticos.
Ayudas a espacios privados
El Cabildo de Tenerife mostró ayer su interés por ayudar a reactivar la actividad del Teatro Timanfaya, en Puerto de la Cruz. Así lo expresó el vicepresidente y consejero de Cultura, Enrique Arriaga, en el transcurso de una visita efectuada a las instalaciones en la que estuvo acompañado por el gerente del espacio, Antonio González; y los directores de sala y artístico, Francisco González y Patricia González, respectivamente. Arriaga consideró que “hay que ayudar a este tipo de espacios privados para que adopten todas las medidas de seguridad necesarias y así puedan desempeñar su labor con normalidad adecuándose a las dificultades sobrevenidas por la pandemia” y añadió que “desde el Cabildo de Tenerife vamos a colaborar tanto con el Ayuntamiento como los propietarios de la sala para intentar darle vida a través de las diferentes actividades que organiza el Cabildo”. El Timanfaya inició su funcionamiento como sala de cine hasta que en 2011 fue reinaugurado como sala de artes escénicas.
