Pleno del Parlamento de Canarias | Nuevas leyes

El debate político dispara en un mes a 2.000 las nuevas viviendas vacacionales

Desde el 28 de noviembre hasta ahora hay 12.235 pisos turísticos más en el Archipiélago 

La consejera de Turismo, Jéssica de León, conversa desde su escaño con una diputada.

La consejera de Turismo, Jéssica de León, conversa desde su escaño con una diputada. / Andrés Gutiérrez

Salvador Lachica

Salvador Lachica

En tan solo un mes, y al calor del enconado debate político sobre el anteproyecto de la ley que regulará el uso turístico de viviendas que impulsa la Consejería de Turismo, se han dado de alta en Canarias 2.000 licencias nuevas para alquiler vacacional. En estos momentos, y de acuerdo con los datos actualizados que este martes hizo públicos la consejera Jéssica de León en el Parlamento, existen en el Archipiélago un total de 66.972 viviendas vacacionales, lo que supone 273.157 plazas. De ellas, 9.176 tienen licencia pero no están en funcionamiento, según señalaron los propietarios en sus declaraciones responsables remitidas a la propia Administración autonómica.

Pese a estos datos, De León niega que su anteproyecto legislativo suponga un efecto llamada, como se asegura desde la oposición: "el alquiler vacacional crece a un ritmo del 7,95%, frente al aumento del 60% que registró en la pasada legislatura, entre 2019 y 2023".

De León insistió ante la interpelación de la diputada socialista Rosa Bella Cabrera, en que desde el pasado 28 de noviembre, cuando se anunció la consulta pública del anteproyecto legislativo, hasta al 20 de mayo de este año, "el crecimiento fue del 18,27%". Es decir, hay 12.235 pisos turísticos más que hace seis meses.

Sin embargo, De León minimizó estas cifras en comparación con las que desde enero de este año, "y en solo cinco meses", ha supuesto el crecimiento de la vivienda vacacional en Málaga (30%), Madrid (29%) y Barcelona (11%).

En las Islas existen activos 56.796 pisos turísticos que suponen más de 230.000 plazas de alquiler vacacional

Desde el PSOE se denunció el "baile de cifras" ofrecido por el Ejecutivo autonómico, ya que mientras el Instituto Nacional de Estadística (INE) "habla de 46.784 viviendas vacacionales en Canarias con fecha de este último febrero, el Gobierno se refiere a 66.972 y el portal de transparencia a cerca de 57.000".

"No sabemos tampoco las cifras del alquiler vacacional ilegal", afirmó la socialista Rosa Bella Cabrera.

Frente a este discurso, la consejera pidió a los grupos parlamentarios "responsabilidad" y "evitar mensajes alarmistas" en torno a la iniciativa reguladora de la vivienda vacacional:"generan preocupación a la población".

La responsable autonómica remarcó que la ley no viene a prohibir la actividad y que tampoco supondrá el fin de las viviendas vacacionales ya existentes, pero sí establecerá "unos límites" a esta actividad.

La técnica del avestruz

"Este equipo de Gobierno, desde que llegó hace nueve meses, ha tenido la valentía de ponerse manos a la obra y regular un fenómeno que debió ordenarse hace mucho tiempo para recuperar el equilibrio entre la actividad y el residente, pero, sin embargo, el anterior gabinete usó la técnica del avestruz, escondió la cabeza bajo tierra, y no hizo nada", afirmó,

Para la diputada socialista Cabrera, lo que ha hecho el Gobierno de Canarias y la Consejería de Turismo en manos del PP ha sido "negarse a aplicar la Ley nacional de Vivienda, recortar 17 millones de euros para vivienda pública en el Presupuesto regional y favorecer la construcción de viviendas privadas fuera de planeamiento con el Decreto Ley de Vivienda".

"Las políticas de vivienda de este Gobierno tienen dos velocidades: las que afectan a la vivienda residencial privada por urgencia, y las de limitación al alquiler vacacional por trámite ordinario", dijo la socialista.

Cabrera afirmó que el Gobierno ha planteado establecer un régimen diferenciado para pequeños propietarios frente a grandes tenedores, que en muchos casos son empresarios hoteleros.

La diputada socialista criticó que el Gobierno plantee el debate sobre el alquiler vacacional "como si los alojamientos turísticos convencionales no consumieran territorio, y si como la única causa de la escasez de vivienda en Canarias, fuera un supuesto exceso de oferta del alquiler vacacional", cuando la situación también tiene su origen en "el nulo crecimiento del parque público de vivienda durante los años de gobierno de Coalición Canaria".

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