Los empresarios canarios, preocupados ante un clima político "inestable"

La preocupación invade al sector empresarial canario. El nuevo Gobierno liderado por el socialista Pedro Sánchez y apoyado por siete formaciones de distinta ideología política –Sumar, ERC, PNV, EH Bildu, BNG, Junts y Coalición Canaria– tiene en vilo a los empresarios isleños que ven «inestable» esta unión de partidos y temen que Canarias y España pierdan atractivo para los inversores internacionales como consecuencia de los pactos con los independentistas catalanes. Tampoco gusta en el sector los acuerdos de ámbito económico que el nuevo presidente anunció durante la sesión de investidura, políticas que desde las patronales empresariales canarias creen que «no favorecen» al crecimiento de los negocios y del empleo en las Islas.

«Es muy complicado mantener un gobierno con tantos conceptos ideológicos diferentes», apunta el secretario general de la Confederación Canaria de Empresarios (CCE), José Cristóbal García, quien considera que ese «maremágnum» conduce a deducir que la longevidad del pacto será «limitada». Con este contexto y con la amnistía sobre la mesa, García percibe «malas sensaciones» entre el tejido empresarial canario. «Hay percepción de inseguridad jurídica, de quiebra en el reparto de poderes y eso no es nada bueno», aclara.

Y esa misma idea la comparte el presidente de la CEOE Tenerife, Pedro Alfonso Martín, quien defiende que con el nuevo Gobierno se consagra una gestión en la que España y Canarias pierden «mucho atractivo para las inversiones internacionales al producirse un menoscabo de la seguridad jurídica». Para el líder de la patronal muchas empresas se frenan a la hora de invertir cuando observan «los cambios de timón que se dan en materia fiscal» y pone de ejemplo las modificaciones en áreas como la energía o la banca. Una situación que, según Alfonso, «perjudica» a los empresarios isleños. Desde la CEOE Tenerife aseguran que seguirán trabajando para recuperar la credibilidad internacional, intentando atraer fondos y proyectos hacia el Archipiélago.

Promesas

En lo que también coinciden los representantes de las patronales empresariales es en denunciar «la falta de medidas» planteadas por el nuevo líder del Ejecutivo para incentivar el crecimiento del tejido empresarial del país y crear un clima favorable para su desarrollo. Sánchez ha prometido que en la presente legislatura verá la luz un nuevo Estatuto de los Trabajadores, que garantizará por ley la revalorización del Salario Mínimo Interprofesional. El objetivo es que se mantenga en el 60% del salario medio, tal y como determina el acuerdo entre PSOE y Sumar. Además, prometió recortar la semana laboral de 40 a 38,5 horas en 2024 y a 37,5 en 2025.

«Hay percepción de inseguridad jurídica, de quiebra en el reparto de poderes»

J. Cristóbal García

— Secretario general CCE

«Los acuerdos económicos anunciados en nada favorecen a la mejora de la productividad de un país que está a la cola de Europa», lamenta García, quien recuerda que España vuelve a estar por «debajo del 85% del PIB europeo». Para el secretario general de la CCE los anuncios que ha hecho Sánchez son de «pérdida de competitividad y de incremento de gasto» en un escenario en el que las limitaciones al endeudamiento «se aplicarán con bastante rigor». Para García, las medidas centradas en «tirar más de gasto público» echan para atrás a los inversores que ante un contexto de incertidumbre con «escenarios cambiantes» prefieren no meterse en experimentos inversores.

El secretario general de la Confederación insiste en que los más perjudicados por las medidas de Sánchez serán los autónomos y pequeñas y medianas empresas, que supone el 95% del tejido en España. «A ver cómo se apañan para reducir la jornada, para incrementar la cotización a la seguridad social y todas estas cuestiones», se pregunta.

«España y Canarias han perdido mucho atractivo para las inversiones extranjeras»

Pedro Alfonso

— Presidente CEOE Tenerife

Tampoco le gustó la batería de propuestas al presidente de la CEOE Tenerife. «No hay política de recorte de gastos ni políticas de eficiencia, ni nada», apunta. Alfonso exige al presidente del Gobierno que cumpla con la agenda canaria pactada con Coalición Canaria y que el Archipiélago no pase a ser su último asunto a tratar. «Habrá que empezar a gobernar para todos y no solamente para los que apoyaron la investidura», afirma.

A pesar de la preocupación y de la incertidumbre de los empresarios, tanto García como Alfonso descartan un escenario de ruptura del país. «Vivimos en una democracia madura, avanzada y las protestas son legítimas siempre que no sean violentas», defiende el secretario general de la CCE. Alfonso espera un «gobierno crispado y complicado» pero mantiene el compromiso de trabajar conjuntamente. «Este país hay que construirlo, apoyaremos y ayudaremos al Ejecutivo y solo pedimos que se cuente con nosotros en la misma línea», reclama el presidente de la CEOE Tenerife, quien asegura que con «lealtad institucional y con confianza» se podrá arreglar todos los problemas. 

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