Los sectores económicos más afectados por la crisis no quieren aplazamientos en el pago de los impuestos sino que la Administración les exima de pagar la parte proporcional de los tributos correspondientes al tiempo que han estado cerrados o con unas restricciones severas. Pero lo más urgente hoy por hoy para los autónomos y las pymes son las ayudas directas de forma inmediata para tener liquidez suficiente con el fin de seguir abiertos porque la tardanza del Gobierno en sacar las bases y conceder las ayudas puede resultar letal para muchos negocios que penden de un hilo y se ven abocados a cerrar.

El decreto ley de aplazamiento de impuestos publicado ayer en el BOC es un “parche” que no soluciona el verdadero problema, según los empresarios, y por eso exigen las ayudas directas cuantos antes, algo que aún tardará algunas semanas mientras se preparan las bases de las convocatoria.

El presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos de Canarias (ATA), Juan Carlos Arricivita, advierte que el aplazamiento en el pago de tributos aprobado por el Gobierno canario sólo deja para más adelante el problema de la falta de liquidez de las empresas y que, en su opinión, se va a agravar con el paso de los meses. “Si no se factura no hay dinero, lo que tiene que hacer la Administración es condonar el pago de impuestos porque de nada vale que no lo puedas pagar hoy si dentro de seis meses puedo estar peor y el problema se agrava”, advierte.

Lo fundamental para el representante de los autónomos es que si las pequeñas empresas y las micropymes se ven obligadas a cerrar por ley “de inmediato se active las ayudas directas para compensar ese periodo porque sin liquidez y facturación no hay forma de sobrevivir”. Según el presidente de ATA, “llevamos diez meses esperando a que se decidan a dar ayudas directas, pero no podemos esperar varias semanas más a que estén las bases y no se sabe cuánto más para recibirlas, hay que hacerlo ya”, agrega. También Arricivita recuerda las ayudas habidas hasta ahora para los autónomos desde el Cabildo de Tenerife, por ejemplo, y que después de varios meses no se han dato todavía a muchos de las empresas que las han solicitado.

El presidente de la Asociación de Bares, Cafeterías, Restaurantes y Ocio Nocturno de Las Palmas, Fermín Sánchez, se muestra claramente en contra de la moratoria fiscal aprobada por el Ejecutivo regional. “Lo que no se factura no se puede pagar”, asegura tajantemente Sánchez que lo que reclama es que la Administración “nos compense” por la obligación legal de cerrar o restringir los negocios. El dirigente empresarial recuerda que “llevamos diez meses solicitando que se nos ayude pero ni por el Estado ni por el Gobierno canario ha llegado el apoyo y ahora nos dicen que los impuestos los paguemos dentro de seis meses, lo que tienen que hacer es que durante el periodo que hemos estado cerrados o con fuertes restricciones se nos exima de pagar los impuestos en el mismo porcentaje, nada de aplazamientos”.

Por su parte, el secretario general de la Federación de Áreas Urbanas de Canarias, Abbas Moujir, admite que la moratoria fiscal aprobada por el Ejecutivo regional es un “balón de oxígeno” ahora pero si no hay ayudas directas cuanto antes la previsión es que la crisis económica empeore “y en octubre no habrá nada que pagar”. Como representante de comercio, ocio y servicios en las áreas comerciales abiertas, Moujir recuerda que el comercio minorista está exento de hacer la declaración trimestral del IGIC, por lo que el impacto de la medida publicada ayer en el BOC tampoco se notará mucho en las pymes del comercio de las Islas.

Moujir teme que el sector del comercio minorista no se beneficie de las ayudas directas que prepara la Comunidad Autónoma, por lo que ha pedido una reunión con la Consejería de Turismo y Comercio. “Ahora dicen que si no es con fondos europeos se endeudarán pero mientras tanto los días van pasando y la situación se hace insostenible”, lamenta el dirigente empresarial, debido a que una parte importante del comercio depende de un turismo que no hay.

El presidente de la Confederación Canaria de la Pequeña y Mediana Empresa (Cecapyme), José Juan Socas, espera por la “letra pequeña” de las ayudas directas que ha prometido el Gobierno canario para conocer las condiciones que se deben cumplir para acceder a las mismas. Socas recuerda las ayudas para pagar los alquileres de los autónomos y las pymes del Gobierno central que al final quedaron diluidas porque muchos negocios no cumplían algunas de las condiciones impuestas.

Socas reconoce que todo lo que sean facilidades para pagar los impuestos es bienvenido pero para “negocios pequeños que ahora están cerrados o con escasa facturación de nada les vale que ahora no paguen los impuestos si tienen que hacerlo dentro de seis meses y puede que muchos de ellos cierren antes, ahora lo que hace falta son las ayudas y que los trámites sean rápidos”, advierte el presidente de Cecapyme, que exige al Ejecutivo regional que se ahorren la burocracia habitual y que haya un sistema para que las ayudas se puedan abonar de inmediato tras presentar las solicitudes.

CC ve la moratoria “lamentable”

La diputada del Coalición Canaria por Tenerife, Rosa Dávila, calificó ayer de “incomprensible” que la moratoria fiscal impulsada por el Gobierno de Canarias deje fuera al pago de tributos de enero. En un comunicado, Dávila recordó que el pago finalizó ayer y que afectará “a miles de empresas que se han visto obligadas a cerrar”, primero en Tenerife, “y ahora en Gran Canaria y Lanzarote”, por la declaración del nivel 3 y 4 de alerta, remarcó. Por todo ello, CC insiste en que la moratoria fiscal publicada en el BOC es “incomprensible”, “lamentable” y está “muy alejada” de la respuesta que necesita el tejido económico para hacer frente “a las dramáticas consecuencias de la pandemia”. La diputada acusa al Ejecutivo “no solo de trabajar tarde y mal” sino “de poner una soga al cuello a miles de pymes y de autónomos”.