El presidente canario, Ángel Víctor Torres, reconoció ayer que ninguna ayuda que pueda movilizar el Gobierno regional podrá compensar la totalidad de las pérdidas que han sufrido las pequeñas y medianas empresas (pymes) y los autónomos por la pandemia. “Es imposible que podamos cubrir el daño que se ha producido en el sector económico”, aseguró ayer en el pleno del Parlamento de Canarias, donde defendió el plan de rescate para la hostelería, el comercio y otros sectores especialmente dañados por la crisis, presentado por el Ejecutivo regional la semana pasada, que incluye 165 millones para ayudas directas.

Torres valoró que Canarias, al haber controlado “mejor” la pandemia respecto a otros territorios del país, ha podido mantener abiertos más sectores económicos. Aún así el parón turístico, del que depende buena parte de la economía del Archipiélago, ha asestado un golpe más fuerte en las Islas. El presidente manifestó que Canarias es la comunidad autónoma que más ayudas ha otorgado al tejido económico, solo el año pasado, señaló, se destinaron 95 millones de euros a mitigar el impacto que la pandemia ha causado en la facturación de muchos negocios. “El esfuerzo que hizo el Gobierno sin tener certidumbre económica está fuera de toda duda”, recalcó.

Este año, el plan de rescate contempla 400 millones de euros, 165 millones ayudas directas y el resto llegará a las empresas a través de moratorias fiscales que buscan ampliar su liquidez. El presidente aseguró que los fondos para ayudas directas “están garantizados”, ya que si Europa no autoriza a utilizar el dinero procedentes de los fondos de reactivación para este fin, el Gobierno canario recurriría al endeudamiento para cumplir con este compromiso. “Estamos haciendo un esfuerzo importante, menos mal que existe lo público”, defendió.

El vicepresidente y consejero de Hacienda, Román Rodríguez, confió en que finalmente no haya problema para poder utilizar los fondos europeos para repartir ayudas directas y aseguró que ya se lo han reclamado a Bruselas.

Rodríguez anunció que los 165 millones de euros en ayudas se incrementarán hasta los 172, ya que se unirán los siete millones que la Consejería de Economía tenía consignados en el presupuesto regional para este fin y manifestó que a lo largo de este años se sumarían más fondos procedentes de otras consejerías.

El vicepresidente también destacó el aplazamiento fiscal incluido en el plan de rescate. De esta manera, las empresas podrán aplazar hasta octubre el pago de los impuestos del primer trimestre sin tener que abonar ningún tipo de interés. Un mecanismo a través del que Rodríguez sostuvo que Canarias ha sido “más generosa” que el Estado, que ha acordado aplazar el cobro del IVA seis meses, pero solo tres de ellos sin intereses.

Tramitación

En cuanto a la tramitación de estas ayudas directas, no pudo concretar cuándo podrán ponerse en marcha pero sí que tratarán de ser “rápidos y dirigentes” y que harán “el máximo esfuerzo” para que estas medidas sean lo más eficaces posible.

El paquete de ayudas para los sectores productivos más afectados por la pandemia centró ayer buena parte del debate del pleno parlamentario. La oposición puso sobre la mesa la insuficiencia de los fondos consignados para este rescate. Así lo consideró la portavoz de Ciudadanos (Cs), Vidina Espino. “No son 400 millones de euros en ayudas, son retrasos en el cobro de impuestos y 165 millones que son insuficientes para las pymes que se están arruinando en Canarias”, sostuvo, al mismo tiempo que recalcó que “ni siquiera están garantizados”.

Argumentó que Rodríguez “se lo toma con calma” porque “lleva tantos años en política con coche oficial que no sabe lo que es pasarlo mal en esta tierra” y aseguró que no se explica cómo con lo que costó conseguir que se permitiera a las comunidades usar el superávit “sigue guardado en un cajón”.

El diputado nacionalista Pablo Rodríguez también recriminó al Gobierno de Ángel Víctor Torres su autocomplacencia. “Diez meses después, lo único que ha hecho es presentar planes que no tienen garantizados fondos financieros”, determinó y acusó al Ejecutivo de haber sustituido “la política por la propaganda”.

Para Rodríguez los anuncios que lanza el Gobierno surgido del pacto de las flores “generan incertidumbre” porque se han abordado sin consenso con los agentes sociales y económicos. Además, lamentó que no haya fechas concretas para la concesión de ayudas, por lo que lamentó que el Ejecutivo esté llevando a cabo un “ejercicio de improvisación”.

El portavoz parlamentario de Nueva Canarias (NC), Luis Campos, que también preguntó al Ejecutivo acerca de este paquete de ayudas, resaltó que ninguna comunidad autónoma “puede presumir” de lo que ha hecho Canarias, contratando sanitarios y profesores para hacer frente a las necesidades de la pandemia, y ahora haciendo un “esfuerzo extraordinario” en ayudas “para los que peor lo pasan”, a pesar de no ser de su competencia.