La Policía Nacional ha detenido recientemente en la zona alta de Las Palmas de Gran Canaria a un hombre, de 35 años y nacionalidad española, como presunto colaborador de la organización terrorista Daesh y por autoadoctrinamiento. Los investigadores pudieron determinar que el arrestado había fotografiado la sede de una asociación LGTBI de la Isla, como detalló ayer el Ministerio de Interior en un comunicado de prensa. Y?es que el colectivo homosexual es uno de los objetivos del Estado Islámico, que ha ejecutado a varias personas por su condición sexual. El supuesto terrorista fue puesto ayer a disposición de la Audiencia Nacional, que decretó su ingreso en prisión.

El cuerpo estatal estaba tras la pista del presunto yihadista desde hacía tiempo. Éste era muy activo en internet, donde participaba en múltiples chats de contenido terrorista radical, en los que alababa los atentados terroristas del 11-S (de 2001) en Estados Unidos, del 11-M (de 2004) en Madrid o el cometido en agosto de 2017 en Barcelona y Cambrils (Tarragona). No obstante, decía haberse convertido al islam tras las bombas que provocaron 193 muertos en la capital española. Esta conversión, sin embargo, no la llevaba a la práctica por completo ya que, según Interior, se jactaba de llevar una estética occidental, sin rastro de signos de radicalidad en sus vestimentas o en su rostro, para evitar ser detectado o levantar las sospechas de las fuerzas y cuerpos de seguridad.

Colombia y Argentina

En la red mantenía conversaciones con otros yihadistas conversos de países latinoamericanos, como Colombia y Argentina, que ya fueron detenidos en 2018 gracias a las informaciones que proporcionó la Comisaría General de Información de la Policía Nacional a los respectivos cuerpos de estos estados. En estos contactos, el ahora detenido elogiaba sus conductas y les animaba a cometer acciones terroristas en sus países.

A?lo largo de la presente semana, los agentes de la Policía Nacional procedieron a su detención que se precipitó ante un incremento de su radicalización. Durante el registro de su vivienda, situada en la zona alta de la capital grancanaria, encontraron gran cantidad de material sobre el terrorismo yihadista: vídeos con juramentos a Daesh por parte de otros yihadistas, vídeos con ejecuciones y material gráfico en donde se aprecian armas, vestimentas de combate y otros materiales de guerra. Asimismo, la investigación pudo determinar que había fotografiado durante los últimos meses la sede de una asociación LGTBI, colectivo hacia el que había mostrado una especial aversión y al que dirigía comentarios ofensivos. El Ministerio del Interior recalcó en el comunicado que la comunidad LGTBI ha sido señalada por Daesh como uno de sus objetivos de manera reiterada.

El arrestado pasó ayer a disposición de la Audiencia Nacional, que decretó su ingreso en prisión preventiva por orden del Juzgado Central de Instrucción número 6. Investigadores de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional, en colaboración con Brigada Provincial de Información de Las Palmas de Gran Canarias, han desarrollado la investigación bajo la supervisión del citado juzgado y la coordinación de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.

"No van a conseguir amedrentarnos"

Marcos Ventura, vicepresidente del Colectivo Gamá que representa a la comunidad LGTBI en Las Palmas de Gran Canaria, afirmó ayer que no siente miedo después de conocer la detención del presunto yihadista que fotografió la sede de una asociación en la Isla. "No nos amedrentan, no van a conseguir que tengamos miedo y sigamos luchando por nuestros derechos", afirmó.

Ventura recalcó que no es la primera vez que el colectivo se ve amenazado y recordó que en el orgullo han aparecido esvásticas con mensajes homófobos. Actos que, según el vicepresidente de Gamá, han incrementado con la irrupción de la extrema derecha en el escenario político. "Sabemos que el discurso del odio está y cada día se hace más presente y más fuerte".

El activista apuntó que las políticas de determinados partidos han normalizado los ataques al colectivo como el hecho de que los padres lleven a sus hijos homosexuales a terapias que consideran "torturas". "Algo que no se puede cambiar sólo se puede definir como tortura y hay gente que lo está defendiendo públicamente", apostilló. Estos mensajes dan, en opinión del vicepresidente de Gamá, "alas a esa gente que llevaba muchos años escondida en los armarios, que no se atrevía a salir a la luz publica porque estaba mal visto y ahora está volviendo a salir". "El activismo es ahora más difícil y más necesario", añadió-

Asimismo, Ventura quiso agradecer la actuación contra el terrorismo de Policía Nacional y Guardia Civil, que calificó de "encomiable". "Siempre están ahí presentes y garantizando la seguridad", declaró.