Historias del sur de Tenerife: una leyenda británica y un concurso en un bar de la Isla

Hay historias que suceden en nuestra propia Isla y que, solo cuando pasa una amplia cantidad de años, salen a la luz

El director de un hotel del sur de Tenerife muestra las instalaciones del establecimiento, vacías, en lo peor de la pandemia de la covid.

El director de un hotel del sur de Tenerife muestra las instalaciones del establecimiento, vacías, en lo peor de la pandemia de la covid. / Andrés Gutiérrez

El Día

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Hay historias que nunca terminan saliendo a la luz y que ocurren muy cerca de nosotros. Aquí, en EL DÍA, pudimos encontrar dos de esos cuentos que parecen salidos de una película o de sucesos que solo ocurren en otros países: dos hermanos se conocieron tras 28 años y una boda, protagonista por las calles de Santa Cruz.

Otra de esas historias, esta con un toque de humor, sucedió en el sur de Tenerife y tiene a una leyenda británica como protagonista. Se trata de la leyenda escocesa del mundo del fútbol, Gordon Strachan.

El que fuera entrenador de la Selección Escocesa de fútbol o del Celtic de Glasgow, uno de los equipos más históricos del balompié británico, contó una anécdota con Tenerife como protagonista secundario y recogida en el Daily Record.

Y es que durante un mes de febrero, durante la década de 1990, el escocés viajó a Tenerife junto a Ron Atkison y la plantilla del Coventry City. Una vez aquí, salieron a un bar donde había un concurso de dobles. Empujado por sus compañeros, Strachan se presentó imitándose ¡a sí mismo!

Lo más sorprende de esto es que no lo ganó: "Fui a tomar una copa y terminé segundo en una competencia de dobles haciendo de mí mismo. La mujer que ganó era una doble de Vera Duckworth que no se parecía en nada".

Tras ser impulsado por su compañero Harry Roberts, que alcanzó a gritar "tenemos un doble de Gordon Strachan aquí", destaca que "fue la historia más divertida, quedé segundo por ser yo mismo". A pesar de no ganar un concurso por no parecerse lo suficiente a sí mismo, se fue contento porque "me obsequiaron con una botella de vino por quedar segundo".