89-63 (+26): Solo faltó la «cabra» para ser un paseo legionario

Iván Rodríguez busca la canasta FOTO DE MANOLO EXPÓSITO

Mate de Silvestre. FOTO DE MANOLO EXPÓSITO

meridiano    89
torrejón    63
Meridiano S/C

Rueda (2), Rodríguez (16), Calvo (6), Ruiz (9), Silvestre (20) –inicial–, Díaz (20), Bollit (2), Alonso (10), Álvarez (0), García (2) y Martínez (2).

Torrejón

Iglesias (11), Álvarez (3), García (3), Ajero (18), Mulas (16) –inicial–, Durán (9) y Herranz (3).

Árbitros

E. Aguiar y R. Méndez. Muy buen arbitraje. Antideportiva al Torrejón y técnica a Mulas (27 m.).

Parciales

13-5, 28-11, 40-20, 46-24; 59-24, 74-40, 85-48 y 89-63.

Incidencias

Palacio de los Deportes de Santa Cruz de Tenerife, con presencia de unas 250 personas, todas ubicadas en la grada de los banquillos.

AGUSTÍN ARIAS, S/C de Tfe.

Importante, aunque no determinante, victoria del Meridiano Santa Cruz sobre el Torrejón (89-63). Los discípulos de David Hernández, que siguen paso firme hacia los “play-off” de ascenso, necesitan seguir en esta línea y superar el próximo sábado al Santa Cruz de La Palma para garantizarse una de las tres plazas con premio. Será un derby canario con trascendencia para la escuadra capitalina, lo que debe animar a la afición cestista a acudir en mayor número a los 250 de  ayer tarde.

El partido con el Torrejón fue un paseo legionario pero sin la famosa cabra. No la necesitaron. Mostraron un nivel muy superior ante un rival que acudió a esta cita con solo siete jugadores –será para ahorrarse pasajes de avión– lo que les pasó factura. Porque fueron borrados del parquet a base de intensidad defensiva, rapidez para subir el balón ante la inexistencia del balance defensivo y la facilidad para culminar, bien desde el exterior o en la “pintura”, donde Silvestre, en el primer tiempo, y Nacho Díaz, en el segundo, marcaron enormes diferencias.
Tantas que los de blancos pusieron el +23 en el minuto 12 (34-11), un +38 en el minuto 27 (69-31), para alcanzar la máxima en el 33 con un arrollador +40 (83-43).

Silvestre fue el jugador del primer cuarto al firmar 12 de los 28 puntos del Meridiano Santa Cruz, no encontrando los visitantes el antídoto para frenar el poderío del número 9.

El Torrejón estaba causando una pobrísima impresión, resultando complicado entender cómo ocupa un puesto tal alto en la clasificación, con 19 victorias. Lo curioso y hasta ridículo era observar a su entrenador, Sanz, queriendo buscar en las decisiones de los árbitros la razón de la pésima actuación. Vamos, de risa.

Tras el descanso, al que se llegó con un 46 a 24 –Silvestre contabilizaba por entonces 16 tantos, seguido por los 10 de Iván y los 7 de Ruiz– en la segunda mitad el partido solo tuvo una dirección, como si a la cancha le sobrara la canasta que atacaba el Torrejón. Porque las diferencias seguían aumentando, aunque con otros protagonistas, ya que Nacho Díaz, la última adquisición, relevó a Silvestre, alcanzando el minuto 30 con 20 puntos en su casillero particular y un 74-40 en el marcador.

David Hernández movió su banquillo con asiduidad, bajando la intensidad del juego de manera clara, lo que supo aprovechar el Torrejón para adecentar un tanteo que, en el minuto 33, llegó a situarse en los 40 puntos (83-43).

Minutos para todos, incluido el joven pívot Alejandro Martínez, quien quiso dejar constancia en las estadísticas al conseguir una canasta, tras asistencia genial de Iván Rodríguez. El único jugador que no saltó al parquet, por razones obvias, fue Alberto Delgado.

Pasaron los minutos para acabar con el 89 a 63, siempre al son de las dos personas y de los dos niños que no dejaron de hacer sonar los tambores.