«¡Esto sí que es, un pedazo E-QUI-PO!»

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Los pocos aficionados desplazados al Gran Canaria Arenas volvieron a disfrutar con la victoria del Iberostar Tenerife. Y van… Además de ser pocos y dejarse la garganta, los vikingos y demás aficionados canaristas vieron con emoción cómo la plantilla al completo volvió a la cancha, subió las gradas y festejó el éxito con ellos. Fue un momentazo que se grabó para la historia:

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Solo 6.500 aficionados en un aforo superior a los 10.000. Y si un derbi no llena es señal evidente del enfriamiento de la afición grancanaria con los resultados de su equipo. Acaso ya olvidaron los momentos de gloria?… Esa clasificación para la Euroliga?…. El buen aficionado tiene que estar con su equipo en las buenas y, de manera más clara, en las malas.

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Franco, un «vikingo» canarista que se fue así de «duro» al Gran Canaria Arena

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El «señor YO» se fotografió con el gran Carmelo Cabrera