La entrevista en EL DÍA al nuevo presidente de la FCB

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 Agustín Arias, S/C de Tenerife

Manuel Gómez apenas lleva una semana ejerciendo de presidente de la Federación Canaria de Baloncesto. Manifiesta que desde la proclamación no ha dejado de mantener reuniones a niveles de todas las islas, tratando de establecer su programa.

¿Quiénes le acompañan en esta aventura cestista?

Como vicepresidente económico Pedro Cazorla; Luis Afonso, adjunto a secretaría y organización; Carlos Olano, comité técnico; María Castañeda, área de comunicación, con una persona de Gran Canaria por nombrar, que se encargará del comité arbitral. José Antonio Negrín seguirá en el Comité de Competición al igual que Isabel Villar es la jueza única de apelación.

También cuenta con gente que trabaja en el basket de Lanzarote y Fuerteventura.

Leocadio Pérez y Guillermo Mújica se encargan de la dirección técnica y arbitral, respectivamente, en Lanzarote, mientras que en Fuerteventura están Igor Casas y Manuel Terrones.

¿Como valora el proceso electoral?

Positivamente. El respaldo ha sido mayoritario. En las primarias tuvimos una suerte dispar pues en algunos sitios pensábamos tener algún club más, si bien fue suficiente para lo que quería. Les hicimos partícipes del programa, que denominamos Baloncesto en positivo, encontrando la predisposición de la gente. Es un programa muy ambicioso y al tiempo real, que vamos a ejecutar en estos cuatro años.

Habla usted de respaldo mayoritario cuando el resultado de las elecciones fue de 16-14, hablándose incluso de dos votos que cambiaron de destino en el último momento.

Lo primero es que debemos tener un respeto para los 3o asamblearios. Clemente Mesa habló de falta de lealtad, algo que considero no procede porque estamos hablando de dos votos pero perfectamente podrían ser cuatro o seis. ¿Quién tiene la garantía de cada uno de los 30 votos?. Hay que ser respetuoso con el resultado y con cada uno de los que votaron a uno o a otro.

Una de las claves de la FCB es mantener el equilibrio Tenerife-Gran Canaria.

El programa es para Canarias, no para islas concretas. En Gran Canaria se ha producido una rebelión de los clubes de base, están muy unidos y cuando me reuní con ellos entendieron muy bien nuestra plancha y el programa, encontrando un respaldo total. Ahora mismo no existe la fragmentación que había antes y creo que es la primera vez que hay unificación entre Tenerife y Gran Canaria.

¿Un programa factible en tiempos de crisis económica?

La situación hace que la cosa esté complicada, pero tenemos ideas para llevarlas a cabo, como la de buscar financiación externa al margen de las subvenciones o los ingresos típicos de los clubes.

Hablemos de las selecciones y las dificultades habidas para concentrarlas.

Queremos que los entrenadores puedan convocar con la suficiente antelación, que puedan trabajar lo mejor posible tanto en Gran Canaria como en Tenerife. Este fin de semana ya hay concentraciones cadetes en Lanzarote, Fuerteventura y La Palma. Nos ha cogido justo de tiempo porque en enero hay que viajar al Campeonato de España. Vamos a hacer cuatro concentraciones antes del Nacional, convocando directamente a quince jugadores/as, de las que saldrán los doce que acudirán al Campeonato.

¿Y el dinero para las concentraciones de dónde saldrá?

Vamos a cambiar lo que se estaba haciendo hasta ahora. Quiero que los deportistas estén lo más a gusto posible; antes se quedaban en casas de otros jugadores/as y ya estamos reservando para hospedarse en residencias. Hay subvenciones para ello y también aportaciones de empresas particulares.

¿Qué opina de las ligas regionales de Primera y Júnior y la escasa participación de equipos?

Cada vez hay menos equipos y es debido a la situación económica que se vive. Para que exista alicientes para participar en esas ligas lo primero que tenemos que hacer es abaratar los costes, cambiar el formato de la competición y hacerla más atractiva, bien con la fórmula de los play-off. Y el cambio hay que buscarlo para la Primera Autonómica y para la Júnior. Con tan pocos equipos y sin alicientes no podemos seguir.

Para todo proyecto la palabra clave es don dinero.

Efectivamente. Estamos trabajando para solventar el tema de los desplazamientos, siendo necesario reunirnos con los grandes transportistas de las islas, llámese Binter, Naviera Armas, Fred Olsen… También queremos contar con entidades comerciales que estén en todas las islas y que puedan ofrecer descuentos a los clubes que compitan en ligas regionales, como el transporte terrestre, ya sean “rent a car” o guaguas. Otro objetivo es hacer proyectos conjuntos con los dos clubes canarios de la Liga ACB.

La situación del basket en Fuerteventura y Lanzarote.

Ya hay gente asignada en una y otra islas que van a ayudar a que exista un buen funcionamiento. Queremos separar Lanzarote y Fuerteventura en lo que a la organización concierne. El principal problema es la falta de árbitros y los pocos clubes existentes. Vamos a incidir muchísimo en la escuela de formación de árbitros.

Jugadores extranjeros y las selecciones canarias.

Hemos puesto encima de la mesa el tope de seleccionables. En cadetes podemos estar hablando de solo dos jugadores/as y ninguno en infantiles y minibasket. Esa es mi intención, aunque hay que contar con la opinión de los clubes.

¿Y lo de controlar sus edades?

Ese es otro tema. Para actuar sobre las sospechas tiene que haber una denuncia. Así y todo, no podemos ir en

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contra de la legislación española. Si el CSD y la FEB admiten a esos jugadores nosotros no podemos oponernos.

El CSD quiere que los clubes de base den de alta en la SS a todo el que cobra. ¿Qué opina?

Hay que esperar porque creo que este tema se va a solucionar y pronto. El CSD tiene mucha presión a nivel nacional. El planteamiento es muy complejo.