La crónica en la web del Estudiantes

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Iberostar Tenerife demuestra por qué es el líder de la Liga Endesa (63-82)

Iberostar Tenerife demostró por qué es el líder de la Liga Endesa, imponiendo su ritmo en todo momento. Fueron el mejor equipo que hasta ahora ha recibido Movistar Estudiantes en el WiZink Center: supieron parar a Edwin Jackson (sólo 13 puntos), y acabar con la resistencia estudiantil con una salida demoledora en el último cuarto (15-28)

Iberostar Tenerife asaltó el WiZink Center, donde Movistar Estudiantes no hincaba la rodilla desde diciembre, demostrando por qué es a estas alturas de temporada el líder en solitario de la Liga Endesa.

Los de Txus Vidorreta impusieron su ritmo defensivo, dejando al Estu en sólo 63 puntos apagando el brillo de su estrella Edwin Jackson (13 puntos).

Tuvieron en otro viejo conocido de la parroquia colegial como Tariq Kirksay al solista decisivo (16 puntos, con dos triples letales al inicio del último cuarto) dentro de una maquinaria muy bien engrasada.

Salva Maldonado ya advertía en la previa de que había que evitar que el ritmo fuera aurinegro, y es lo que intentaron sin éxito los estudiantiles en el arranque de partido. 2-10 de salida; y la principal arma ofensiva de Movistar Estudiantes, el triple, desaparecida en la primera mitad: 0/13 en lanzamientos exteriores en esos primeros 20 minutos.

Sin embargo, pese a llegar al descanso con un paupérrimo 27-35, en el WiZink Center sobrevolaba la sensación de que se podría competir en la segunda mitad: además de no entrar los triples, se llevaban 9 pérdidas y Edwin Jackson estaba maniatado valorando sólo +1 a esas alturas. Con tantas malas noticias, el -8 parecía remontable a poco que empezaran a salir las cosas.

La primera canasta tras el paso por vestuario fue el primer triple azul del partido. Durante unos minutos el Estu logró correr y Edwin Jackson parecia empezar a carburar; pero poco tardó Iberostar Tenerife en volver a tomar el ritmo Limoges 1993; y volver a superar la decena de puntos de ventaja (36-47).

Una pizca de acierto exterior y un mucho de orgullo (triples de Grimau y Vicedo; y buena defensa para acabar el cuarto 48-54) permitían creer a Movistar Estudiantes.

Pero dos triples consecutivos, bien definidos con una metáfora pugilística por Maldonado en la postpartido como «dos crochets, uno de derecha y uno de izquierda» del ex colegial Tariq Kirksay, tiraron a Movistar Estudiantes a la lona. No pudieron levantarse del golpe y los tinerfeños , en estado de gracia anotando todo por imposible que pareciera, se gustaron con un parcial de 1-16 que finiquitó el partido demasiado pronto.

Al menos no faltó el humor en la grada: 21 abajo y con menos de un minuto por jugarse, la Demencia empezó a corear «sí se puede» y «este partido lo vamos a ganar». El triple final de Vicedo, que ponía el 62-83 definitivo, fue celebrado por la grada como si hubiera valido de algo. Y es que la afición colegial supo reconocer la superioridad del meritorio líder de la Liga Endesa.