Una tromba de agua sorprendió a los vecinos de Las Palmas de Gran Canaria y Arucas en la tarde de ayer, dejando calle y locales anegados, además de atrapar a personas en ascensores. Las primeras grandes lluvias del otoño dejaron hasta anoche 45,4 litros por metro cuadrado en la plaza de La Feria de la capital hasta anoche, y otros 33,4 litros en la localidad norteña, como máximas precipitaciones en el conjunto del Archipiélago, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Y anoche persistía, regando muchos puntos de la geografía insular.