Residencia del presidente alemán, Joachim Gauck, este miércoles. Le tocaba impresionar con los regalos a sus ilustres invitados: la reina Isabel de Inglaterra y su marido. Y al principio, lo ha conseguido. Un mapa de Europa del siglo XVIII ha hecho las delicias del Duque de Edimburgo. El problema ha surgido cuando le ha tocado el turno a la reina Isabel de Inglaterra. Porque un retrato de su padre y de ella sobre un pony azul cuando tenía diez años la ha dejado desconcertada. "¿Se supone que ése es mi padre?", ha comentado con educación.
