Mientras Londres se prepara para sus Juegos Olímpicos, en una pequeña localidad inglesa se disputan otros juegos, los Costwold Olimpicks. Con un equipamiento casero, los contrincantes se enfrentan a la prueba estrella: la competición de patadas en la espinilla. A base de golpes en tan delicada zona, hay que conseguir derribar al contrario. Una dolorosa victoria que se celebra por todo lo alto. Pero en estas olimpiadas alternativas, que nacieron en el 1600, hay más. La carrera de sacos, la de carretillas, sobre tabla o la de montar un puzzle en equipo.