La Guardia Civil ha asestado un duro golpe al tráfico internacional de marihuana con la intervención de 8.000 plantas de marihuana en El Campello, Mutxamel y Alicante, cultivos que controlaba una organización de holandeses que tenía plantaciones en varias viviendas y enviaba la droga a Holanda, Bélgica y Alemania.