El desafío ahora es convencer al Supremo de la voluntad de Junqueras de abrazar el diálogo y el pacto y de que no hay riesgo de rebelión Andreu Van den Eynde nadie puede entender ahora que en Cataluña se pueda producir una revuelta violenta Ése será el planteamiento que presentarán ante la sala de apelación para que pueda salir de prisión e intentar ser investido presidente catalán, en caso de que Puigdemont, aún en Bruselas, no pueda hacerlo. De hecho, ya le están exigiendo que explique cómo lo va a hacer. Pero la libertad es una opción, reconocen, incierta, con lo que si no lo logra, Junqueras pedirá ser trasladado a una cárcel en Cataluña para poder asistir a los plenos y a su hipotética investidura.