Ya están en prisión siete de los ochos yihadistas detenidos el viernes en nuestro país en Cataluña, Castilla y León y Castilla-La Mancha. Están acusados de integrar una célula del Estado Islámico dedicada a la propaganda, al adoctrinamiento y a la captación de nuevos militantes. El líder, incluso, llegó a colgar un video en Internet, en el que aparecía su hijo de dos años, diciendo que de mayor quería ser "yihadista". Los arrestados, habían creado un completo entramado en la red, para difundir todo tipo de material propagandístico de los terroristas.