Hoy no hemos podido ver a Marco Antonio Tejeiro, el excontable del instituto Nóos, porque no se ha quitado el casco, y ni le hemos escuchado porque los periodistas no le han podido arrancar ni una sola palabra. Tejeiro se despachó a gusto contra sus antiguos jefes y tiró de la manta, por escrito, pero hoy ha preferido guardar silencio. Ni siquiera ha respondido a las acusaciones de su cuñado Diego Torres que le ha dicho que miente en su confesión. El juez José Castro, que tiene todavía pendiente de resolver 15 recursos antes de comenzar el juicio, ha citado el 12 de julio para tomar declaración al excontable de Nóos.