El galerista Gao Ping, detenido como cabecilla de la trama de blanqueo de dinero de mafias chinas, acompañó durante la tarde-noche de ayer a la policía en los numerosos registros que realizaron en sus locales. Entre ellos, el centro de arte Gao Magee Gallery, en Madrid, donde la policía se ha incautado de documentación y obras de arte. Gao Ping ha tratado en todo momento de impedir que las cámaras le grabasen cubriéndose la cara con unos papeles.