La Policía Nacional intercepta de forma simultánea dos veleros en alta mar con más de 500 kilos de cocaína. Dos equipos del GEO fueron desplazados a la zona para efectuar el abordaje de ambas embarcaciones: la "nodriza", que escondía la droga bajo el suelo, y el barco de apoyo que introduciría finalmente el estupefaciente hasta la costa española.