La presencia de Obama en Atenas ha blindado la ciudad. Helicópteros y policías han vigilado de cerca el que hasta ahora ha sido el momento mas simbólico de esta última gira europea del aún inquilino de la Casa Blanca. Un presidente saliente paseando solo entre las mayores ruinas de la democracia, rodeado de policías y con la constante presencia de una entusiasmada guía turística. Ha sido esta una visita de Obama con una cara y una cruz.