El terrible suceso tuvo lugar el pasado 15 de febrero; una madre llamó a la policía de Florida para que fuera a su casa y se llevaran a su hijo de 25 años a un psiquiátrico, avisándoles que su hijo tenía problemas mentales. El joven, Lavall Hall, sufría esquizofrenia y se encontraba en el jardín del hogar familiar, en calzoncillos y con un palo de escoba.