A pesar del alto el fuego, las tensiones en Ucrania continúan. Los nacionalistas quieren dejar claro cuál es su posición ante Rusia, y lo han hecho derribando la estatua más grande de Lenin en el país. Estaba situada en una plaza de la ciudad de Járkov, y cientos de personas se congregaron para verla caer y celebrarlo. Y mientras, cerca de la ciudad de Donetsk se produce un nuevo intercambio de prisioneros ucranianos y rebeldes ante la mirada de observadores internacionales. Por ahora se desconoce el número exacto de prisioneros en poder de cada una de las partes de este conflicto.