Las comunidades autónomas no podrán endeudarse más allá del 0,3 por ciento del PIB el próximo año. Así lo ha fijado el Gobierno, aunque con el rechazo de diez de ellas, que critican, además, que los mayores ingresos se destinarán a reducir la deuda. El Consejo de política Fiscal y Financiera ha acordado también, que el reparto del déficit será igual para todas, no habrá objetivos asimétricos. Las comunidades dispondrán de 10.000 millones de euros más el año que viene, pero no los podrán emplear en su totalidad en la mejora de servicios públicos.