Sancionado de por vida y desposeído de sus siete tours por dopaje, Lance Armstrong recorre por segundo día algunas de las etapas de la ronda gala. El americano, de 43 años, rueda junto a un equipo de aficionados, entre ellos el exfutbolista inglés Geoff Thomas. Todos corren juntos por una buena razón: recaudar fondos para la lucha contra la leucemia. A pesar de que su presencia en Francia ha despertado algunas críticas, la mayoría de la gente respalda la iniciativa.