Nadie hacía presagiar que Ghana pudiese plantarle cara a Alemania, pero en un Mundial, el factor sorpresa cuenta por encima de todo. Cientos de personas siguieron muy atentos el encuentro entre ambas selecciones. En Brasil, las aficiones de Alemania y Ghana acabaron viendo juntos el partido y celebrando el empate final. El gran Miroslav Klose evitó la derrota germana contra una extraordinaria Ghana (2-2). Las Estrellas Negras fueron capaces de dar la vuelta a un marcador que había abierto Götze. Los fans de uno y otro bando disfrutaron a lo grande del partido con cerveza y salchichas.