En una sala de montaje, Dani Rovira se pregunta curioso cómo “pegar un pelotazo” en la 30 edición de los Premios Goya (“se ha hecho ya de todo. Tengo que hacer algo diferente, aunque sea el ridículo”, comenta). En el transcurso de la búsqueda, analiza momentos estelares de ediciones pasadas y recibe la visita del presidente Antonio Resines y Penélope Cruz.