El vicepresidente de la Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro (Ashotel), Enrique Talg, reconoce a EL DÍA que «la situación de colapso de nuestros principales ejes viarios en Tenerife, en concreto de la autopista del Norte (TF-5), tiene sin duda una afección directa al sector turístico. Influye negativamente en la movilidad no sólo de nuestros visitantes sino también de nuestros residentes y de nuestras plantillas de trabajadores y proveedores».
Desde Ashotel asumen que se trata de «un problema complejo, pues no se resuelve en dos días un déficit tan importante en la planificación de las infraestructuras básicas de una isla». A juicio de Talg, «no solo es una cuestión de hacer más carreteras y autopistas, sino de poner fin a la ausencia de unas políticas de movilidad sostenible decididas para la optimización de las infraestructuras que ya tenemos en Tenerife».
Enrique Talg añade que «la movilidad sostenible es también un asunto complejo, difícil de enfrentar, que se agrava por ese déficit de infraestructuras que arrastramos y que están influyendo en la calidad de vida de los residentes en Tenerife y de nuestros trabajadores del sector turístico. Y que generan también unos elevados síntomas de insatisfacción entre nuestros turistas». Ashotel subraya que los atascos reiterados, tanto en el Norte como en el Sur, afectan a la imagen turística general de la Isla, puesto que en ocasiones condicionan de forma importante los periodos de ocio y descanso de los visitantes.
Enrique Talg lamenta que la imagen de unas vías colapsadas sea «una de las últimas que se llevan del destino»
Talg es empresario hotelero en la ciudad norteña de Puerto de la Cruz y pone un ejemplo sangrante del impacto de las colas en la experiencia turística en la isla: «Debido a estos atascos, en ciertos horarios es necesario recoger con hasta con seis horas de antelación a los clientes que se alojan en hoteles de Puerto de la Cruz para poder trasladarlos al aeropuerto a coger sus vuelos. Y esta mala imagen de colapso es una de las últimas que se llevan del destino que han visitado».
La patronal hotelera remarca que «se hace necesaria y urgente una intervención en los principales ejes viarios de la isla, tanto la TF-5 como la TF-1, pero también apoyamos incondicionalmente las políticas de potenciación del transporte público y de descentralización de las principales administraciones públicas. Así como aquellas que conlleven potenciar los servicios de las infraestructuras sanitarias existentes, como el hospital del Norte», ubicado en el municipio norteño de Icod de los Vinos.
Ashotel entiende que el liderazgo en la puesta en marcha de todas estas medidas «corresponde a las administraciones públicas, que tienen la potestad de gobernar». Para Enrique Talg, «nunca es tarde, y sabemos, por ejemplo, que muchos ayuntamientos están redactando Planes Municipales de Movilidad Urbana Sostenible y que el Cabildo de Tenerife trabaja en un Plan Insular de Movilidad». Ashotel se pone a disposición de todas las administraciones para «debatir y proponer acciones».
Más colapso por un desprendimiento
Un desprendimiento de rocas y vegetación en un margen de la TF-5, a la altura del kilómetro 27 en el municipio de La Victoria de Acentejo, produjo poco después de las dos de la tarde de este miércoles 9 de noviembre un gran atasco en dirección Santa Cruz de Tenerife. Aunque las rocas no llegaron a causar daños en la vía, fue necesario cortar temporalmente uno de los dos carriles de la autopista en dirección al área metropolitana, lo que colapsó el tráfico hasta el Valle de La Orotava. A la altura de Santa Úrsula se produjo un accidente que contribuyó a que el atasco se agravara y terminara afectando también a la carretera general de Acentejo, que muchos conductores trataron de usar como vía alternativa. Tras la rápida intervención de la Guardia Civil y de los servicios del área de Carreteras del Cabildo de Tenerife, la zona quedó limpia y abierta completamente al tráfico apenas una hora después del incidente
